Columna. Marlani Sánchez. @marlanisanchez
Creo que he
tenido la pesadilla de estar años en una recámara de sueño y haber despertado o
muchos años adelante…no, eran muchos años atrás. Creo que fue por ponerme a ver
anoche Oblivion, sí, porque la comida nocturna de ayer fue pura proteína. Así como Silvio;
soñó con serpientes, blancas, transparentes, que en sus barrigas llevaban lo
que pudieron arrebatarle al amor. Así. Soñé que me había despertado en un
extraño lugar donde en actos solemnes importantes figuras llamaban a otras
"marico" o "maricón", en realidad no recuerdo bien, y a
otros como que les decían que "pueden hacer con su culo lo que les diera
la gana", todo esto encorbataos y cámaras de televisión encendidas, siendo
que por otro lado un papa decía que él no era quien para juzgar a quienes
decidían tendencias diferentes, qué broma con el surrealismo que en ocasiones
pueden traerse los sueños.
Soñé que
importantes programas de televisión salían del aire, que en un país en
conflicto ya había más de 500 muertos, qué sueño más loco. De paso soñé que
aunque la Vinotinto no perdió, bueno, tampoco ganó, y yo quería que ganara
pues...por si fuera poco era temporada de vacaciones, agosto, lo que los europeos
llaman el verano, y yo estaba en la playa y lo que hacía era llover y llover,
con truenos incluidos, ay no, esa quizás fue la peor parte de sueño. Hablando
de lluvias, soñé que alguien a quien adoraba me decía con palabras distintas
"boca de jarro" porque empezó a llover y le dije:-"¿Tienes
linterna? Porque aquí cuando llueve se va la luz", y se fue.
Soñé también que
el aseo tenía tres días sin pasar, y ya los cueritos y las tripas de los pollos
que me arregló mi mamá estaban podridos, con moscas, y tenía que lidiar para
que ni los perros ni los gatos se los comieran o los regaran en la calle y
tener que recoger eso sin vomitar, eso en plena campaña por alcaldías.
Fue un sueño que
sí, claro que pudiera catalogarse de pesadilla, ¿no creen? Fíjense en el sueño
en el Día de la Virgen de La Consolación unos sacerdotes interrumpieron una
serenata a la Virgen, en un pueblito llamado Táriba, porque consideraban que
las canciones de un tal Luis Silva eran ofensivas.
Soñé ¡qué
robaban cabello! Pelo, cabello pues, el de la cabeza de las mujeres. ¡En serio!
¿Qué? ¡Para venderlo pues! No, es que yo tampoco entendía porque jamás (en el
sueño) me había teñido el cabello ni mucho menos ponerme extensiones, de eso
sabía más mi colega, una a la que llamábamos "la espectacular", era
de apellido Rodríguez. Pero en el sueño me enteré que ponerse unas extensiones
de "cabello" quien sabe de qué ¡puede costar hasta 15 mil bolívares!
y entonces no justifiqué que por ese motivo se estén robando el natural, el
nuestro, ¡esas extensiones deben valer mucho más!
En realidad,
esto que sigue no sé si lo soñé o se trata de algo así como un dejavú: Estaba
en una rueda de prensa, no recuerdo bien el motivo de la misma, pero recuerdo
que era algo de un “recule”, no sé, y una colega de apellido Cabrera, con una
cabellera muy parecida a la mía, negra, lacia, abundante, larga, gruesa, me
decía que en un sitio llamado Calabozo ya se había registrado un caso de “las
pirañas” (en el sueño así le decían a esas personas que se dedicaban en la
calle a cortar y robar cabello), yo, en el sueño, era una persona de muy buen
humor, a todo le sacaba el lado positivo y me la pasaba haciendo chistes hasta
de las cosas más serias, en el sueño mis chistes daban mucha risa, y entonces
le dije:
-Imagínate, y estas melenas nuestras deben
costar una boloña…nos miramos y reímos, la risa nos duró poco; hasta que otro
colega (no lo he dicho, pero en el sueño éramos periodistas) llamado Alexander
Medina, que en el sueño era excelente profesional, nos dijo que en un
supermercado llamado algo así como “Mercatradona Plus, según una denuncia
telefónica en su programa radial, supuestamente ya se había registrado un caso
de robo de cabello. Mi colega y yo nos miramos ya no muy sonrientes, y quedamos
(periodistas al fin, y además de hermosas cabelleras) en que averiguamos en
asunto. “Las pirañas” solo han robado cabello de mujeres, por razones obvias,
en caso contrario mi colega Medina debe descuidar, él bien pudiera hacer una
cuña del Banco Federal.
No quiero
recordar qué más soñé, pero gracias a Dios fue solo una pesadilla…