Prensa. FPV
La
Federación de Psicólogos de Venezuela (FPV), con motivo de la celebración del
Día Mundial de la Salud Mental, se une
a la conmemoración bajo su lema para este año: “Primera Ayuda Psicológica”. La
FPV, viene trabajando con la finalidad de contribuir a desarrollar prácticas
enmarcadas en el modelo la Organización Mundial de la Salud (Organización
Mundial de la Salud. (2016).
Recuperado
de http://www.who.int/features/factfiles/mental_health/es/) que considera a la
salud mental como: "...un estado de bienestar en el cual el individuo es
consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de
la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una
contribución a su comunidad."
En
esta oportunidad, consideramos pertinente reiterar nuestra preocupación por el
acentuado deterioro de la salud psicológica de la población venezolana.
Deterioro que es una consecuencia directa de la exposición prolongada a
diversas situaciones, tales como: desabastecimiento generalizado, disminución
del poder adquisitivo, inseguridad, polarización, conflictividad
socio-política, entre otros aspectos; que provocan un estado general de estrés
producto del desasosiego, frustración, desesperanza, tensión, tristeza y miedo.
La
frecuencia e intensidad de las situaciones antes mencionadas, está agotando los
recursos
psicológicos
del venezolano y por ende; poniendo en riesgo su integridad, la de su familia y
su comunidad. Lo anterior está desarticulando relaciones interpersonales,
familiares, sociales, y alterando la emocionalidad y la racionalidad individual
y colectiva, donde los procesos de duelos son cada vez más frecuentes en
especial el denominado “duelo migratorio”.
Los
efectos de este tipo de estrés “crónico”, donde los recursos físicos y
psicológicos se ven
consumidos
por el desgaste a largo plazo, repercuten sobre las tasas de: ansiedad;
depresión; enfermedades: autoinmunes, músculo-esqueléticas, gastrointestinales,
cerebrovasculares y cardíacas; violencia, consumo de sustancias prohibidas,
migraciones e incluso suicidios entre otras afectaciones.
En
este sentido expresamos nuestra profunda preocupación y alerta por los
trastornos de salud mental que se están manifestando en la población
venezolana, hoy convertidos en un asunto de salud pública. Aunado a lo antes
expuesto, la actual crisis que está atravesando el sector público relacionado
con la salud mental en lo referido al: acentuado deterioro de sus servicios,
disminución del número de camas, fallas en los suministros (alimentación,
medicinas e insumos en general), disminución del personal calificado para la
adecuada atención; agrava la delicada situación de la salud mental en el país. Es por ello que resulta impostergable la
revisión de las políticas en esta materia, para lo cual esta Federación se pone
a la disposición.
Reconocemos
los esfuerzos adelantados por el Ejecutivo Nacional con el fin de atenuar los
efectos de la crisis en los diferentes ámbitos. Sin embargo, consideramos que
los mismos podrían tener mayor efectividad y alcance, si existiese la
disposición de aceptar el apoyo ofrecido por organizaciones nacionales e
internacionales. Lo anterior sería un factor clave de éxito, en el mejoramiento
de la actual situación país; que es lo que actualmente reclama y requiere la
población venezolana. Por una Venezuela, donde la Salud Psicológica y la Salud
Mental sea una prioridad.
Por una
Venezuela, donde la Salud Psicológica y la Salud Mental sea una prioridad.
Junta Directiva
de la FPV