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El gobernador del estado Lara, Henri
Falcón, defendió la unidad de dirigentes políticos de oposición y de acciones
para sacar al país de la crisis en la que lo ha hundido el gobierno y no
descartó un acuerdo político, una enmienda constitucional y una elección
presidencial adelantada.
Desde Lara, donde instaló el Consejo de
Estado para la Paz y la Justicia, Falcón indicó que donde no hay organización y
compromiso gana la anarquía y en eso sí ha sido efectivo el gobierno,
reconoció.
“El gobierno es malo gobernando, son
malos gerentes, tienen a este país de cabeza, pero articulan muy bien en lo
político, saben a quién señalar, porque no es casual por ejemplo que sean Lara
y Miranda, estados donde hay dos liderazgos arraigados de la oposición
venezolana, donde aparecen grupos paramilitares”.
La declaración salió a colación de los
señalamientos del vicepresidente de la República Tareck El Aissami, sobre la
complicidad de él y de Henrique Capriles en la violencia desatada en las
protestas del mes de abril, a raíz de las dos sentencias del Tribunal Supremo
de Justicia que eliminaba la inmunidad parlamentaria, asumía las funciones de
la Asamblea Nacional y otorgaba poderes adicionales al presidente de la
República.
“Es el momento de la unidad, no nos
veamos cómo adversarios por Dios, cuántas diferencias tendrá el gobierno y su
partido, que se caen a pedazos pero actúan en una sola dirección con una
estrategia y con un objetivo”, aseguró. Al reiterar la necesidad de mantener la
unidad en la diversidad y frente al compromiso que exige el momento, Falcón
afirmó que piden elecciones de gobernadores y alcaldes, pero no desdeña la
presidencial.
“Hemos dicho que si la elección
presidencial ¿por qué no?, en el marco de un acuerdo político, de una
negociación sensata para que no se nos caiga el país a pedazos, más de lo que
hasta ahora, un acuerdo político, una enmienda constitucional y una elección
presidencial adelantada, de tal manera que el tema electoral es vital como una
salida necesaria para poder abordar la situación de crisis que vive el país”,
consintió. Dijo que la creación del Consejo de
Estado para la Paz y la Justicia persigue articular acciones para proteger las
acciones de calle, que considera expresiones legítimas, necesarias y naturales.
“Estamos en un momento muy peligroso en
Venezuela y así lo hacíamos saber desde hace varios años atrás, hemos sido
reiterativos en este clamor, que no es lo que recoge un gobernador, sino un
ciudadano, es lo que expresa el 95% de las personas en la calle, especialmente
las clases trabajadoras y los más humildes que padecen hambre porque el
problema inflacionario erosiona su salario”.
El Consejo de Estado acompañará a la
protesta pacífica de calle, dará respuestas a víctimas y sus familiares,
prestará atención a las mayorías que se expresan con razón, dijo, pero alertó
que “aparecen pequeños focos para desnaturalizar el espíritu y la razón de la
protesta y surgen los grupos paramilitares. Nosotros estamos llamados a detener
daños a bienes públicos y privados y evitar que la gente salga afectada”.
Sostuvo que desde los distintos niveles
de la gobernación de Lara se “hará un acompañamiento a la protesta ciudadana para
aislar el paramilitarismo y el vandalismo, a hechos delictuales que procuran
transforman una protesta en atracos y saqueos, eso no es protesta”.
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