Prensa.
AFP
Los cancilleres de los países fundadores
del Mercado Común del Sur (Mercosur) se reunirán de urgencia el sábado en
Buenos Aires para analizar la “grave situación institucional” en Venezuela,
donde el máximo tribunal de justicia asumió las funciones del Parlamento.
“Ante la grave situación institucional
en la República Bolivariana de Venezuela” los integrantes del Mercosur “han
resuelto convocar una urgente reunión de Cancilleres” el sábado “para analizar
posibles vías de solución”, dijo el comunicado.
Una fuente de cancillería precisó a la
AFP que el encuentro se realizará en la sede protocolar del Ministerio de
Relaciones Exteriores, el Palacio San Martín en Buenos Aires, “entre las 14H00
y 15H00 locales (las 17H00 y las 18H00 GMT aproximadamente).
La reunión fue convocada por la
canciller argentina Susana Malcorra, ya que Argentina preside actualmente el
bloque, y contará con la presencia de sus pares Aloysio Nunes de Brasil, Eladio
Loizaga de Paraguay y Rodolfo Nin Novoa de Uruguay.
“Los países fundadores del Mercosur
reiteran su inalterable apoyo a los principios fundamentales del Estado de
Derecho y a la preservación de la democracia en la región latinoamericana”,
agregó el comunicado.
Los cancilleres de Argentina, Brasil,
Paraguay y Uruguay suspendieron a Venezuela como Estado miembro del Mercosur el
pasado 1 de diciembre, acusado de incumplir sus compromisos comerciales y
políticos con el bloque, lo que Caracas niega.
Entre una avalancha de críticas
internacionales al gobierno venezolano, el presidente argentino Mauricio Macri
llamó el jueves “a recomponer el orden democrático” en Venezuela e insistió en
la necesidad de que se cumpla con un calendario electoral.
Macri recibió a Lilian Tintori, esposa
del encarcelado líder opositor venezolano Leopoldo López, a quien “manifestó su
preocupación por la disolución de la Asamblea Nacional”.
Tintori dijo en una rueda de prensa en
Buenos Aires que “los acontecimientos de hoy [por jueves] son un paso más de
una dictadura” y pidió a los países de la región “auxilio por los 30 millones
de venezolanos que no tienen comida”, que son víctimas de la delincuencia y que
“están presos en un país sin garantías”.
La noche del miércoles, la Sala
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, a la que la
oposición acusa de servir al gobierno de Nicolás Maduro, asumió las funciones
del Parlamento.
La decisión provocó críticas del
secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis
Almagro, Estados Unidos, Brasil, México, Colombia, Perú, Chile y la Unión
Europea.