Venezuela volvió a sus viejas andanzas.
Tras una fase de grupos prolíficos en cuanto a goles se trata, los chamos
dirigidos por Rafael Dudamel regresaron a la versión del Sudamericano de
Ecuador, en el que dominaban los compromisos, pero les costaba un mundo romper
las redes rivales. A pesar de esto, Venezuela tiró de calidad y de garra para
superar al combinado de Estados Unidos (2-1) en prórroga y avanzar a las
semifinales dle torneo.
Ante Japón, en Octavos de Final, la
vinotinto no pudo pasar del empate a cero en los noventa minutos, y tuvieron
que esperar a la prórroga para que un cabezazo casi milagroso del capitán,
Yangel Herrera, los metiera en la siguiente instancia.
Este sábado, ante los Estados Unidos,
los venezolanos disputaron uno de sus mejores compromisos en el torneo, creando
peligro desde el minuto uno y con un Adalberto Peñaranda que parecía flotar por
sobre el resto de los jugadores.
Las llegadas, sobre todo en la primera
mitad, se suscitaban una tras otra, pero la falta de efectividad de los
delanteros criollos y la tarde perfecta de Jonathan Klinsmann evitaron que los
venezolanos se fueran arriva en el electrónico. A pesar de esto, Venezuela no
decayó y lo intentaron hasta que el árbitro pitó el final de la primera mitad.
En el segundo tiempo, Venezuela perdió
un poco de manejo, pero ganó en peligrosidad, sobre todo a balón parado,
materia en la que los muchachos tienen un máster. Las dos más claras del
compromiso (dejando de lado el gol bien anulado a Sergio Córdova en la primera
mitad), llegaron con cabezazos de Ronaldo Chacón y de Sergio Córdova, ambos a
centro de Ronaldo Lucena, que se estrellaron en el travesaño norteamericano.
Mala suerte.
Yangel Herrera, quien vio la amarilla,
también la tuvo de cabeza, pero Venezuela no conseguía los caminos y terminó
sufriendo en el último segundo, cuando un cabezazo de Palmer-Brown se marchó a
centímetros del arco defendido por Wuilker Fariñez.
Otro 0-0. Venezuela volvió a la
prórroga, tras 120 minutos disputados con Japón, los nuestros tuvieron que
volver a dar un plus en un alargue, pero valió la pena.
Al sexto minuto del tiempo extra, cuando
Estados Unidos se estaba acomodando sobre el campo, Ronaldo Chacón y Samuel
Sosa armaron una buena jugada por la izquierda y Sosa, quien ingresó en la
segunda mitad, filtró un balón medido al área que consiguió a Adalberto
Peñaranda en el punto de penal y este, derrochando la calidad que atesora en
sus botas, conectó de primera para conseguir el gol de la apertura del
marcador.
Así terminó la primera parte del
suplementario, pero no sería la última palabra de los venezolanos. En el
segundo tiempo, Estados Unidos ingresó al campo en busca del empate, pero la
defensa venezolana se mostró igual de sólida que a lo largo de todo el torneo.
Y cuando todo parecía estar hecho, al
minuto 115, finalmente la pelota parada dio sus réditos. Ronaldo Lucena cobró
un tiro de esquina desde la derecha y Nahuel Ferraresi conectó un gran
testarazo para colocar el 2-1.
El gol parecía sentenciar las acciones,
pero hubo tiempo para que Estados Unidos quebrantara el arco de Wuilker Fariñez
a través de Jeremy Ebobisse. Fariñez dejó así en 506 minutos su récord de
minutos sin recibir goles, pero de poco importó.
Venezuela no se distrajo más y logró la hazaña
histórica, nuestros chamos, nuestro orgullo, nuestra esperanza, se colaron con
autoridad a las Semifinales del Mundial. Venezuela está entre los mejores
cuatro equipos del torneo y están lejos de conformarse.