Prensa. voanoticias.com
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos
Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, dijo que en Venezuela “hay un patrón evidente
de uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes” y dijo estar preocupado
porque “no hay indicios de que esa actuación vaya a cesar”.
“Esas violaciones ocurren en plena ruptura del
Estado de derecho en Venezuela, con ataques constantes del gobierno a la
Asamblea Nacional y a la Oficina de la Fiscal General”, agregó Zeid. “La
responsabilidad de las violaciones de derechos humanos que estamos registrando
corresponde a los más altos niveles del gobierno”.
El Alto Comisionado afirmó que la decisión de
cesar en su cargo a la Fiscal General, adoptada por la Asamblea Constituyente
el cinco de agosto, es motivo de honda inquietud, e instó a las autoridades a
que garanticen la investigación independiente y eficaz de las violaciones de
derechos humanos en las que estén involucrados los cuerpos de seguridad y los
colectivos armados.
Zeid exhortó además a las autoridades a que
presten atención al llamamiento de la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos, que pidió al Estado venezolano que tomara medidas para garantizar la
protección de la Fiscal General depuesta.
Las declaraciones de Zeid, este ocho de agosto,
llegan luego de la divulgación de las conclusiones de un equipo de expertos de
la ONU que realizaron entrevistas a distancia de víctimas y familiares,
testigos, miembros de organizaciones de la sociedad civil, periodistas, y otras
personas.
Las conclusiones del equipo indican la existencia
de un patrón de otras violaciones de derechos humanos, que abarcan
allanamientos violentos de viviendas, torturas y malos tratos a las personas
detenidas en relación con las protestas.
El Alto Comisionado expresó también su grave
preocupación por los ataques a periodistas y empleados de prensa, a quienes las
fuerzas de seguridad han obstruido su trabajo de informar sobre las
manifestaciones. Según las fuentes, algunos y algunas periodistas han recibido
impactos de cartuchos de gas lacrimógeno y perdigones, a pesar de que llevaban
claramente visible su distintivo de periodistas. En varias ocasiones los y las
periodistas han sido detenidos y amenazados y han sido despojados de sus
equipos.
El informe señala que algunos grupos de
manifestantes también han actuado con violencia y se ha informado de ataques
contra agentes de las fuerzas de seguridad. Ocho elementos de los cuerpos de
seguridad han muerto en el contexto de las manifestaciones.
El Alto Comisionado instó a las autoridades
venezolanas a que pongan fin de inmediato al uso excesivo de la fuerza contra
los manifestantes, cesen las detenciones arbitrarias y liberen a todas las
personas que han sido detenidas arbitrariamente. Zeid recordó a las autoridades
la prohibición absoluta de usar la tortura, de conformidad con el derecho
internacional de los derechos humanos. Asimismo, pidió que se suspenda el uso
de tribunales militares para juzgar a los civiles.
“Exhorto a todas las partes a que colaboren con
el fin de solucionar las tensiones del país, que se agravan con rapidez, a que
renuncien al uso de la violencia y a que tomen medidas con miras a establecer
un diálogo político significativo”, declaró Zeid. Está previsto que a finales
de agosto de este año se publique un informe completo, con las conclusiones del
equipo.