Prensa.
efectococuyo.com
Ahora,
la elección de alcaldes está en puertas. El Consejo Nacional Electoral (CNE)
anunció a inicios de año que los comicios se celebrarán en diciembre y, tras
los resultados electorales del 15 de octubre que favorecen al oficialismo, el
rumor de un probable adelanto de fecha se acrecienta.
El
posible cambio de fecha de las municipales gana terreno en la opinión pública,
en medio de denuncias de presunto fraude electoral de la Mesa de la Unidad
Democrática (MUD), lo que abre la pregunta: ¿Debe la oposición participar en
esta nueva elección?
El
analista político y experto electoral Dimitris Pantoulas respondió que la
coalición opositora sí debe acudir. “Mientras exista abierta una ventana de
participar en las elecciones, siempre se tiene que dar la batalla. En
democracia los votos y las elecciones son la corona del sistema”.
Sin
embargo, aclaró que para participar se debe lograr un acuerdo político previo
que garantice una misión de observación internacional.
“Si
la MUD no participa, significa la entrega de los municipios del país y eso
cierra la posibilidad de hacer manifestaciones. Todas las protestas de
principios de año se hicieron en municipios opositores como Chacao o Baruta.
Estaría entregando todo el sistema de Estado al Gobierno”, afirmó.
Para
el analista, los municipios son incluso más importantes que las gobernaciones.
El
politólogo Ricardo Sucre coincidió en que la oposición debe acudir a las
municipales. Pero debe “analizar el revés de las regionales” y reestructurar la
forma de hacer política. “Es evidente que seguir con la estructura que tiene o
con las vocerías no es correcto, sobre todo porque la política que siguieron no
les trajo resultados positivos”, aseguró.
“La
MUD pasó de hablar del 333 y el 350 (artículos de la Constitución que garantizan
la protesta) a hablar de las regionales y eso creó una fractura con sus
simpatizantes”, agregó.
No
obstante, el politólogo y coordinador de Venebarómetro, Edgard Gutiérrez, no
comparte la misma tesis. “La oposición tiene que competir en una sola elección
que es la elección por las condiciones, y esas condiciones no se van a lograr
sin presión (…) Quedó demostrado que no basta tener la inmensa mayoría, porque
las condiciones fraudulentas eran imposibles de sortear. La clase política
seguramente va a querer participar en las elecciones, pero ¿qué haces cómo
fuerza política si no tienes gente que vote por ti? Porque va a ser bastante
difícil que la gente tenga razones para salir a votar, al menos en el corto
plazo”, manifestó a Efecto Cocuyo.
Participar
representa también un riesgo para la oposición por la potencial abstención. “La
oposición debe generar nuevos liderazgos. La gente no fue a votar porque el
mensaje de la MUD no llega. Tienen que hacer un trabajo político de casa por
casa”, manifestó Pantoulas.
El
analista va más allá e incluso advierte que la coalición opositora pudiera
dejar de existir como la conocemos, si no se renueva. “Hay que ver si la MUD va
a seguir siendo la misma coalición con los mismos integrantes. Está afectada
con divisiones y fuerzas centrífugas muy fuertes que parecen hablar del fin de
la coalición como la conocemos”, opinó.
Sucre
apuntó que una de las vías para contrarrestar la abstención es lograr un
dominio real de una maquinaria y el pulso real de los números electorales;
contar con una “maquinaria electoral sólida” antes de enfrentarse a una nueva
elección.
La
futura participación de la MUD en las municipales no es el único tema que ocupa
a la coalición, la posibilidad de que gobernadores opositores electos el pasado
15 de octubre se presenten ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC)
también es una decisión que debe tomar el bloque político.
“La
decisión (de ir o no) debería ser una posición de la oposición en conjunto.
Deben unificar las posturas”. Sin
embargo, Pantoulas señaló que la opinión de no reconocer la ANC debe ser firme. Sucre,
por su parte concluyó: “Si asisten deben dejar claro que no será para
subordinarse, sino para exigir reconocimiento como funcionarios electos.
Pudieran utilizar a José Luis Rodríguez Zapatero como un canal de comunicación
para definir el acto institucional de la juramentación”.
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