Prensa. EFE
El
Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebrará
una reunión informal este lunes 13 por la tarde para analizar la crisis en
Venezuela, informaron fuentes diplomáticas.
Solicitada
de manera conjunta por Estados Unidos e Italia, que preside el órgano, la
reunión se llevará a cabo bajo la “Fórmula Arria” y no dará lugar a resultados
específicos, como la aprobación de una resolución.
Este
formato permite una discusión informal entre los miembros del Consejo de
Seguridad y a ella pueden asistir invitados, ya se trate de países, de
organizaciones o de individuos, que se ven afectados por el tema que se aborda.
De
acuerdo con la información diplomática, el encuentro será abierto a los medios
y permitirá a los miembros del órgano conocer de primera mano la situación
política, económica y social de Venezuela.
En
él participarán el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid
Ra’ad Al Hussein; el secretario general de la Organización de los Estados
Americanos (OEA), Luis Almagro; el titular de Cáritas Internacional en la ONU,
Joseph Cornelius Donnelly, y el coordinador internacional de Foro Penal
Venezolano, Julio Henríquez.
Asimismo,
la reunión dará la oportunidad a los presentes de debatir el rol de la
comunidad internacional y de las organizaciones regionales en la búsqueda de
una solución política a la crisis venezolana y en el acceso de ayuda
humanitaria a quienes lo necesitan.
El
embajador de Venezuela ante la ONU, Rafael Ramírez, acusó esta semana a Estados
Unidos de tratar de desestabilizar a su país tras conocerse que podría
abordarse el tema en el Consejo de Seguridad.
El
máximo órgano de decisión de la ONU ya lo trató el pasado mayo sin que se
produjesen conclusiones conjuntas, aunque varios países consideraron que la
crisis venezolana no es un asunto que deba ocupar al consejo por no revestir
una amenaza para la paz y la seguridad.
Acusan
a la oposición de tratar de evitar reunión de la ONU sobre Venezuela
El
exdiplomático venezolano Diego Arria acusó a la alianza opositora Mesa de la
Unidad Democrática (MUD) de tratar de aplazar la reunión informal sobre la
crisis en la nación caribeña que el Consejo de Seguridad realizará el lunes.
La
demanda de la MUD, que según Arria fue rechazada, intentó retrasar la reunión
para no entorpecer el nuevo proceso de diálogo que el Gobierno chavista y la
oposición tenían previsto comenzar este miércoles próximo en República
Dominicana bajo los auspicios del Gobierno anfitrión.
Las
declaraciones de Arria -que vive en Estados Unidos y también hizo la denuncia
en Twitter- fueron recogidas por varios medios locales.
“Se
hicieron esfuerzos muy importantes para evitar que se celebrara una reunión
nada menos que en la cúpula política del mundo que es el Consejo de Seguridad”,
dijo el que fuera ministro y representante permanente de Venezuela ante
Naciones Unidas.
“Hizo
esfuerzos el Gobierno de la República Dominicana para que se celebrara allí
otra conversación, hizo esfuerzos el régimen presionando a algunos líderes o a
algunos dirigentes de la oposición conocidos, como Florido, Borges”, explicó en
declaraciones al canal colombiano NTN24.
Según
Arria, los esfuerzos provenían del Gobierno de República Dominicana, del
Gobierno venezolano y de la propia oposición.
La
demanda fue supuestamente realizada por el canciller peruano -que lidera el
Grupo de Lima, formado por 12 países americanos para abordar la situación de
Venezuela-, Ricardo Luna, a instancias de la MUD, que supuestamente le informó
del comienzo de un proceso de negociación que desaconsejaba la reunión.
A
través de Twitter la oposición negó los rumores de que el antichavismo haya
pedido postergar la reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en la
que se abordará la crisis venezolana, prevista para el lunes, en razón del
nuevo proceso de diálogo.
La
reunión en la ONU fue convocada por Estados Unidos según la “fórmula Arria”
-ideada por el propio exdiplomático venezolano y que permite reuniones del
Consejo de Seguridad al margen de la agenda oficial- y servirá para que los
países participantes debatan sobre los atropellos a la democracia que se
estarían produciendo en Venezuela.
La
dirección de la MUD negó este sábado haber tratado de forzar el aplazamiento de
la reunión, y se felicitó porque se celebre un encuentro que podría contribuir
a resolver, dijo, la crisis humanitaria que atraviesa el país.
Gobierno
y oposición venezolanos anunciaron el jueves la apertura de nuevas negociaciones,
aunque la MUD aseguró el sábado que la primera reunión -prevista para el
miércoles en Santo Domingo- está “en suspenso” al no haber aprobado el Gobierno
la presencia de varios cancilleres latinoamericanos como supervisores.