Las islas
caribeñas de Aruba, Curazao y Bonaire, ligadas a los Países Bajos mediante distintos
acuerdos político-administrativos, pidieron la ayuda del país europeo para
afrontar la decisión del Gobierno venezolano de cierre de comunicaciones hasta
que no se acabe con las mafias de la región.
Prensa. EFE.-
La
petición de las autoridades de las islas caribeñas, según informan hoy medios
locales, se dirigió al ministro holandés de Relaciones del Exteriores, Raymond
Knops, ya que son los Países Bajos los responsables de las relaciones
diplomáticas de estos pequeños territorios caribeños, muy dependientes para su
economía del intercambio comercial con Venezuela.
Knops
está hoy de visita en las islas caribeñas junto a una delegación del
Legislativo del país europeo. El vicepresidente de Venezuela, Tareck el
Aissami, informó a través de twitter que se extendió el cierre de
comunicaciones con Aruba, Curazao y Bonaire “hasta tanto no se realice” una
reunión con las autoridades de estas islas caribeñas y “se concrete un plan de
acción que combata las mafias”, que según Caracas perjudican a su economía.
Un
funcionario del Gobierno de Curazao subrayó en declaraciones a medios locales
que la solicitud al Ejecutivo holandés busca que se establezca claridad en
relación a las intenciones de Venezuela, dada la importancia de las relaciones
comerciales, particularmente con la petrolera estatal Petróleos de Venezuela
(PDVSA), involucrada en las instalaciones de esa industria en las islas
caribeñas.
Una
ruptura en los lazos comerciales con Venezuela dañaría las economías de las
islas que dependen en gran medida de los acuerdos con PDVSA. Las islas forman
parte de una red regional de refinado y logística que Venezuela ha utilizado
tradicionalmente para llegar a los mercados petroleros internacionales. La
actividad petrolera proporciona a los gobiernos de las islas importantes
ingresos.
Estas
tres islas se encuentran a pocos kilómetros de la costa del estado Falcón, en
el occidente venezolano. El pasado viernes, el jefe de Estado venezolano
anunció el cierre, por 72 horas, de las comunicaciones del país petrolero con
estas islas caribeñas para poner en marcha un operativo que acabe con los
contrabandistas “que le dañan la economía a Venezuela”. Maduro se quejó de que
las autoridades de estas islas -que forman parte de Holanda- no hayan
respondido a las repetidas advertencias de Caracas, y las emplazó a que “tomen
medidas que hemos exigido durante más de dos año”.