Prensa. Efecto
Cocuyo.
Los
arzobispos y obispos de Venezuela señalaron este viernes 12 de enero que el
diálogo entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición, debe
darse en condiciones distintas a las establecidas hasta ahora.
“Es
indispensable un reconocimiento y respeto institucional. Toda negociación ha de
fundamentarse en la integridad de los negociadores, en objetivos claros y en
una agenda preestablecida y conocida, para que pueda gozar de la confianza y
credibilidad de la población”, manifestaron.
Además
explicaron, mediante un comunicado con motivo de la celebración de su asamblea
ordinaria plenaria, que el Gobierno, al entorpecer las iniciativas para que los
ciudadanos señalen “el rumbo que quiere dar a la nación”, crea la posibilidad
de generar la pérdida de la libertad o las “acciones de rebeldía contra el
poder usurpador”.
“Es
el pueblo organizado quien tiene la última palabra. En unión con la mayoría de
los venezolanos anhelamos que la dirigencia política y la sociedad civil
presenten un proyecto de país creíble y realizable”, agregaron.
Los
representantes de la iglesia Católica en Venezuela señalaron que las medidas
para paliar la crisis alimentaria son “insuficientes” y “tienden a crear mayor
dependencia”, mientras que las políticas sociales y económicas están
“infectadas del morbo de la corrupción“.
“Presagio,
Dios no lo permita, del inicio, en nuestro entorno, de la múltiple y dolorosa
experiencia de nuestros vecinos, en particular, cubanos y haitianos“, dijeron
con respecto éxodo de venezolanos y al naufragio de la embarcación con destino
a Curazao, que dejó cuatro muertos y varios desaparecidos.
Los
sacerdotes exigieron la apertura del canal humanitario, la publicación del
calendario electoral, la libertad plena de los presos políticos y que los
organismos del Estado investiguen denuncias sobre torturas y castiguen a los
responsables.