Prensa. EFE.
El
Grupo de Lima, integrado por 12 países americanos, se reunirá el próximo 22 de
enero en Santiago de Chile para “analizar los avances que se han realizado
respecto a la situación en Venezuela”, según adelantó hoy en una rueda de
prensa en Asunción el canciller paraguayo, Eladio Loizaga.
El
Grupo de Lima, compuesto por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa
Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú, surgió en agosto de
2017 cuando sus miembros firmaron la Declaración de Lima, en la que no
reconocían a Venezuela como democracia y consideraban ilegítimos los actos que
emanaran de su Asamblea Constituyente.
De
estos dos países, Chile y México fueron invitados por la oposición venezolana a
participar como observadores en las negociaciones políticas con el Gobierno de
Nicolás Maduro, que se vienen realizando desde diciembre en Santo Domingo, la
capital de República Dominicana. El
canciller paraguayo recordó hoy ante los medios que mañana se celebrará una
nueva ronda de contactos entre ambas partes y contará con el seguimiento de los
cancilleres de Chile y de México.
“En
esta reunión que vamos a celebrar el 22 (de enero), estaremos recibiendo un
informe por parte de ambos cancilleres (Chile y México) con los resultados del
proceso que se está llevando adelante entre la oposición y el Gobierno
venezolano”, agregó Loizaga.
La
última ronda de diálogo concluyó el pasado 15 de diciembre con avances, aunque
sin lograr un acuerdo y las dos partes coincidieron en que necesitaban más
tiempo para llegar a un acuerdo que permita una salida a la grave crisis
política y económica que vive el país.
En
el marco de ese diálogo fueron liberados la víspera de Nochebuena 44 políticos
presos en Venezuela, una de las solicitudes que ha hecho la parte opositora en
esas conversaciones, aunque todavía se exige la excarcelación de más de 200
antichavistas privados de libertad.
Además,
la oposición demanda en este diálogo cambios en el Consejo Electoral, del que
desconfía; la restitución de los poderes del Parlamento, de mayoría opositora,
y la apertura de un canal humanitario para la entrada de alimentos y medicinas
al país.
El
oficialismo pide, por su parte, la aceptación de la Asamblea Nacional
Constituyente y el levantamiento de las sanciones financieras de Estados
Unidos. El
diálogo político venezolano se inició formalmente el 1 de diciembre en
República Dominicana, después de que quedaran en el aire durante varias semanas
las conversaciones de septiembre.
Las
conversaciones cuentan con la participación de los países acompañantes del
proceso, representados por sus cancilleres, así como del expresidente del
Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero. Chile
y México son los países observadores del diálogo a instancias de la oposición,
mientras que Bolivia, Nicaragua y San Vicente y Granadinas son los invitados
por el Gobierno de Nicolás Maduro. EFE