Prensa. EFE.
La
Organización Internacional del Trabajo (OIT) enviará la próxima semana a
Venezuela una delegación tripartita para investigar las alegaciones de la
asociación de empresarios, Fedecámaras, de que el Gobierno no respeta sus
derechos. Así lo anunció hoy en una rueda de prensa el director general de la
OIT, Guy Ryder, en la que explicó que es “bastante inusual” que quien presente
la queja sean los empresarios, en este caso contra el Gobierno.
El
tema fue tratado en el Comité Ejecutivo de la OIT -máximo órgano decisorio- de
noviembre pasado y la conclusión fue pedir a Ryder que organizase una misión
tripartita -representantes de los gobiernos, los empleadores y los
trabajadores- para ir a investigar a Caracas.
La
delegación partirá la próxima semana y se regirá bajo el artículo 26 de la
Constitución de la OIT, según explicó su director general. “Nuestro mandato
será intentar estimular el diálogo entre el Gobierno, los empleadores y los
trabajadores. La queja de Fedecámaras versaba sobre la falta de diálogo con las
autoridades y sobre el hecho de que los empresarios se vean sometidos a
presiones e incluso intimidación”, especificó Ryder.
Agregó
que una de las quejas es que no se les permite la libertad de asociación. Consultado
sobre cuáles pueden ser las repercusiones de la visita de esta delegación, el
alto funcionario dijo que las conclusiones del viaje serán trasladadas al
Comité Ejecutivo en su reunión de marzo, y si así lo estima este órgano, se
podría establecer una comisión de investigación de más amplio espectro.
En
casos anteriores se han establecido este tipo de comisiones de investigación en
Birmania (Myanmar), Zimbabue y Bielorrusia. “Las recomendaciones de esta
comisión de investigación pueden ser de cualquier naturaleza, no tiene
restricciones, solo que se respeten las convenciones de la OIT aprobadas por el
país en cuestión, en este caso la de libertad de asociación, que es de lo que
se han quejado los empresarios”, especificó el director general. Asimismo,
confirmó que tienen luz verde del Gobierno, y ya hay varias reuniones en la
agenda. “Si no tuviéramos la autorización, no iríamos”, concluyó.