Apureños de
nacimiento y otros que han escogido al estado como hogar, hacen hincapié en la
crisis que atraviesa Venezuela; a la vez que hay consenso en que Apure se puede
tener una vida feliz.
Prensa. Senderos
de Apure.net / Pasante José Leonardo
Alcalá.
Foto: Apure Aéreo.
Desde
fuera, suele tildarse al estado Apure como un pedazo de tierra venezolana que
se quedó estancada en el siglo XX, que va en constante involución. Algunas de estas afirmaciones nacen de su contexto
sociopolítico, suele decirse que es “el último estado en cambiar de gobierno de
turno”; otros van más al pasado y culpan al General José Antonio Páez por
“llevarse a los hombres, obligando a las mujeres a juntarse con adolescentes y
conformar familias disfuncionales, que llevó progresivamente a la involución
que tanto ‘mentan’ hoy”, como comenta un libre pensador apureño, cuyo nombre
pidió que no se publicase.
Sean
cual sean los motivos de esta, tan mencionada, involución, el apureño de a pie
todavía sonríe, se mantiene esperanzado y aporta su granito de arena en pro del
desarrollo del estado. Asimismo, demuestra su profundo amor por esta tierra y
su agradecimiento por haber nacido o haber llegado hasta aquí.
Naturales
y adoptados:
Para
conocer de primerísima mano lo que piensa y siente el apureño de a pie, nos
trasladamos hasta la popular Plaza Los Chóferes, sitio de gran concurrencia de
personas y donde convergen ciudadanos de toda clase social.
Son
treinta los habitantes que quisieron ayudarnos en esta investigación; 18
afirmaron haber nacido en el estado, y 12 aseguraron venirse desde otras partes
del país.
Descubriendo
mentes y corazones:
Conociendo
ya sus orígenes, nos adentramos al corazón y mente de cada uno de los
encues-tados.
¿Se
considera feliz viviendo en Apure?
Con
poco vacilar, una mayoría considerable dijo ser feliz viviendo aquí, a pesar de
recalcar la situación crítica del país. Ocho personas respondieron de forma
negativa.
¿Considera
que conoce al estado Apure? (su historia, geografía, cultura, etc.)
La
nota gris de esta investigación, es el hecho de que la mayoría confesara
conocer entre muy poco sobre la región, como lo refleja la gráfica. Esto denota
la necesidad de una promoción eficaz de conocimientos básicos sobre la
historia, geografía y cultura apureña –entre otras tantas áreas–.
¿Es
de los que dice que “Apure es sólo monte y culebra”?
Sin
duda, un común denominador en esta encuesta ha sido el no rotundo que han dado
al preguntársele si suelen decir tan conocida frase. Sólo dos de los
encuestados confesaron que sí lo dicen regularmente.
¿Cree
que el apureño tiene sentido de pertenencia?
Similar
a la respuesta anterior, la mayoría aseguró que, en general, el apureño tiene
sentido de pertenencia y se siente orgulloso de su tierra.
En
materia de educación, cultura, seguridad, economía, entre otros temas de
interés público y social, usted considera que Apure está...:
“Esto
está mal”, cuenta el señor Williams, a la vez que opta por decir que estamos en
retroceso, al igual que seis personas más. En contraste, una gran parte aseguró
que el estado está levantándose, a pesar de manifestar su descontento. Por otro
lado, el otro gran bloque aseveró que Apure está estancado. Cabe destacar que
una de las opciones planteadas –En óptimo desarrollo–
no
fue escogida por ninguno.
Reclamando
y actuando
Las
siguientes dos preguntas se hicieron con la intención de llevar a los
encuestados a la reflexión de saber qué le falta al estado, pero a su vez, qué
querrían hacer en pro de ello.
¿Qué
cree usted que le falta al estado Apure?
Desarrollo
económico, seguridad, alimentación, vialidad, progreso, son de las respuestas
más resaltantes que dieron los encuestados; mientras, una mayoría de casi la
mitad de los encuesta-dos lo resumía en “un buen gobierno”, a lo que el joven
Félix Pérez prefirió llamarlo “falta de interés en un buen liderazgo”. Otros
hicieron énfasis en la necesidad de conciencia, cultura y de fe.
¿Qué
hace / qué haría usted en favor del estado Apure?
Trabajar
y estudiar fueron las respuestas más comunes. Invertir, ayudar, sembrar
conciencia y, simplemente, ser buen ciudadano son otras de las que, con
disposición, respondían. A su vez, un grupo, donde se encuentra el señor Julio,
consideran que la mejora del estado pasa porque haya un cambio de gobierno
nacional.
Apure
en una palabra:
Al
pedírsele que describieran al estado Apure en una sola palabra, la gran mayoría
(62%) respondían con calificativos como “bello”, “encantador”,.... Otros dos
grupos lo definían con los términos “tranquilidad” y “sencillez”. Sólo la joven
Oscari Espinoza lo describió con el término negativo de "aburrido".
Si
no es afuera, prefieren Apure:
En
tiempos de un claro flujo migratorio, una importante mayoría aseveró que,
mientras resida en Venezuela, opta por permanecer en el estado; en gran parte
debido a su tranquilidad, manifestaron algunos.
Más
allá:
Para
complementar esta investigación, les preguntamos sobre sus actividades y
tendencias políticas y religiosas, por ser factores influyentes en su pensar y
actuar.
A
qué se dedican:
Estudiantes,
docentes, comerciantes, funcionarios públicos, trabajadores independientes,
amas de casa un cronista y un folklorista, conformaron el universo de
encuestados, una muestra bastante representativa del colectivo apureño.
Afinidad
política:
Al
tocar el tema político, algunos “arrugaban” las caras. Tres personas se definieron
como “chavistas”, otras dos manifestaron ser opositoras al Gobierno, mientras
que la gran mayoría se declararon independientes, neutrales, “ni-ni”, o
simplemente no quisieron contestar.
Creencias
religiosas:
En
cuanto a credos, el 83% declaró ser Cristiano, de los cuales, la mayoría (53%)
afirmaba ser Católico y 30% Evangélico. El 17% restante aseguró no tener una
identidad religiosa.
En
definitiva:
A
pesar de no ser muy amplia la cantidad de testimonios obtenidos en este trabajo
de investigación, sí se pueden construir con ellos un pensamiento y sentir
general del residente apureño. Sus respuestas y aportes propios reflejan amor
por lo que hoy es su hogar y un optimismo particular. Dibujan un presente
carente de muchas cosas, pero es esa carencia lo que les impulsa a anhelar y
luchar por una realidad distinta –“sólo estando abajo se puede mirar hacia
arriba”, dicen por ahí–.
Un
detalle a resaltar es el hecho de haber hecho estas entrevistas frente al tan
reconocido Palacio de los Hermanos Barbarito que, para las primeras décadas del
siglo XX, llegó a ser el centro de la economía apureña y símbolo de una
prosperidad que hoy se ve lejana.
Esta
encuesta tiene una pregunta extra y es para ti: ¿Quieres quedarte sentado, de
brazos cruzados, quejándote de las carencias que vivimos, o vas a formar parte
de los que con esfuerzo construyen un mejor Apure?
Pasante de
escuela de Periodismo Edward Murrow de Senderos de Apure
José Leonardo
Alcalá.
Estudiante de VII semestre ECOS-UBA-Apure. 
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