Prensa.
Efecto Cocuyo.
Población sin derechos. La Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) y su Relatoría Especial sobre
Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (Redesca) denunciaron
estes jueves, 1 de febrero, que Venezuela atraviesa una grave situación “que no
admite demoras” en cuanto a los derechos a la salud y a la alimentación.
En un comunicado difundido en su sitio
web, la Comisión hizo público que ha recibido información constante que recoge
denuncias sobre la falta de acceso a alimentos, medicamentos y a tratamientos
médicos en el país. Esto en el marco de la falta de información pública y
actualizada por parte del Gobierno.
“El más reciente informe sobre seguridad
alimentaria y nutricional elaborado por la Organización de las Naciones Unidas
para la Alimentación y la Agricultura en colaboración con la Organización
Panamericana de la Salud, ha verificado un aumento de 1,3 millones de personas
subalimentadas en Venezuela para el periodo 2014 – 2016, es decir un 3,9%
adicional al trienio anterior”, advierte el comunicado.
Añade que, de acuerdo con las denuncias
registradas, durante 2017 habrían fallecido entre cinco y seis niños cada
semana por falta de alimentación y que al menos 33% de la población infantil
presentaría signos de retardo en su crecimiento.
Otro dato que destaca la Cidh en el
comunicado es que un promedio de 4,5 millones de venezolanos estarían
alimentándose una vez al día y, en ocasiones, cada dos días. También advierte
que, según el reporte de la agencia de la ONU y la OPS, 11,4% de la población
infantil estaría en situación de desnutrición.
Las advertencias en materia de salud que
hace la Comisión no son menos alarmantes. Se estima que para finales de 2017 el
desabastecimiento de medicinas básicas para enfermedades relacionadas a la
diabetes, hipertensión, diarrea e infecciones respiratorias agudas habrían
sobrepasado el 80%.
El comunicado denuncia que entre 95% y
100% de los hospitales reportaron fallas de medicamentos antirretrovirales para
los personas con vih sida, lo que habría causado períodos de hasta seis meses
sin tratamiento y la muerte de un estimado de cinco pacientes por día.
También se alerta sobre la falta de
reactivos serológicos para descartar la presencia de enfermedades en las
transfusiones de sangre, el desabastecimiento de medicamentos para pacientes
crónicos y “un aumento preocupante” de malaria, zika y difteria desde el año
2015.
La Cidh termina el comunicado con una
invitación al Estado venezolano a publicar información actualizada y a fijar
una posible visita al territorio nacional para “evaluar el ejercicio de los derechos
humanos en su integralidad”.
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