Con
el nuevo aumento salarial anunciado por el presidente Nicolás Maduro este
jueves, 1 de marzo, el sueldo mínimo diario quedó en Bs. 13.088. Con esa
cantidad de dinero no se puede comprar un huevo, que cuesta alrededor de Bs.
17.000, ni una empanada que cuesta Bs. 40.000, la más barata. Para obtenerla se
tendrían que ahorrar tres días de trabajo.
La
diferencia entre el nuevo salario diario y el anterior es de Bs. 4.805, lo que
representa apenas el pasaje ida y vuelta dentro de Caracas, cuyo precio es de
Bs. 2.000 por viaje. Con el sueldo mínimo diario y el cestatiket, Bs. 43.588,
una persona no podría tomar un desayuno popular, como un cachito y un café, que
cuestan juntos Bs 110.000, en una panadería “económica”.
El
sueldo mínimo aumentó 58% entre el 31 de diciembre (Bs.248.510) y este jueves
(392.646), mientras que un kilo de papas en el mismo periodo de tiempo aumentó
200%. Al comenzar el año el kilo del tubérculo se conseguía en Bs. 40.000, lo
que representaba 16,6% del salario mensual vigente entonces; ahora cuesta Bs.
120.000 lo equivale al 30% del nuevo salario mínimo.
El
director de la firma financiera, Econométrica, Henkel Garcia, explicó en su
cuenta de Twitter, que en los últimos 12 meses el ingreso mínimo mensual
aumentó 780%, mientras que “la inflación interanual ronda 6.500%”. Aunque ahora
el ingreso total es de 1.307.646, una familia no podría vivir con esa cantidad
de dinero, según la firma Ecoanalítica que estima que, tan solo en enero, una
familia de 4 miembros necesitaba Bs. 45.000.000 para cubrir sus necesidades y
gastos.
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