Prensa. Nuevo
Herald.
Estados
Unidos señaló el viernes a China, Rusia, Irán y Corea del Norte como países que
violan “a diario” los derechos humanos de sus ciudadanos, y destacó también la
crítica situación de esas libertades en Venezuela, Siria y Birmania, en el
informe anual del Departamento de Estado sobre la materia.
“Los
Gobiernos de China, Rusia, Irán y Corea del Norte violan los derechos humanos
de aquellos que están dentro de sus fronteras a diario, y como resultado,
generan inestabilidad” escribió el secretario de Estado en funciones, John
Sullivan, en el prefacio del informe.
En
una conferencia de prensa, Sullivan destacó también como especialmente
preocupante la situación en Siria, por la larga guerra civil; en Birmania, por
la limpieza étnica contra los rohinyás; y en Venezuela, por su crisis política
y humanitaria.
“El
régimen (del presidente venezolano, Nicolás) Maduro reprime los derechos
humanos de su pueblo y les impide tener una voz en su Gobierno”, indicó el
titular interino de Exteriores. Por segundo año consecutivo, el informe del
Departamento de Estado no contiene una “lista negra” de los países que a juicio
de EEUU tienen el peor historial de derechos humanos del mundo, una tradición
que el Gobierno de Donald Trump ha decidido no continuar.
El
informe, relativo a 2017 y que sirve como referencia al Congreso a la hora de
conceder ayuda exterior, contiene información sobre unos 200 países del mundo,
e identifica una única tendencia global preocupante: “La corrupción y debilidad
gubernamental”, que “amenaza la estabilidad global y los intereses
estadounidenses”. “Algunos Gobiernos son incapaces de mantener la seguridad y
afrontar las necesidades básicas de su pueblo, mientras que otros simplemente
no están dispuestos”, indicó Sullivan.
Sobre
Rusia, el informe indica que la anexión de la península ucraniana de Crimea
“siguió afectando significativa y negativamente la situación de derechos
humanos” en Ucrania, y destaca otras violaciones como “asesinatos
extrajudiciales” y “desapariciones forzadas, tortura sistemática y que a veces
resultaba en la muerte”. También cita la “falta de independencia judicial, los
prisioneros políticos”, “graves restricciones a la libertad de expresión, de
prensa”, de “asamblea pacífica” y de asociación, y un “clima de impunidad”
generado por la reticencia del Gobierno ruso a “procesar o castigar a la
mayoría de los funcionarios que cometieron abusos”.
En
China, el informe indica que las peores violaciones de las que “fue responsable
el Gobierno” incluyeron “ejecuciones sin debido proceso”, “desapariciones
forzadas”, torturas, “detenciones arbitrarias” e ilegales, y restricciones a
las “libertades de expresión, prensa, asamblea, asociación, religión y
movimiento”. Respecto a Irán, el documento menciona “un alto número de ejecuciones”
por delitos menores según los estándares internacionales y sin debido proceso,
“las desapariciones” forzadas, la tortura, “detenciones arbitrarias, cientos de
prisioneros políticos”, y “graves restricciones a la libertad de expresión”.
La
“represión de las protestas nacionales que comenzaron el 28 de diciembre” se
considera en el informe un ejemplo de las “graves restricciones a los derechos
de asamblea y asociación” en Irán. Sobre Corea del Norte, denuncia “ejecuciones
extrajudiciales, desapariciones, detenciones arbitrarias, tortura, campos de
prisioneros políticos”, “juicios injustos”, “abortos coaccionados, tráfico de
personas” y “negación de las libertades de expresión, prensa, asamblea,
asociación, religión y movimiento”.