En el marco del
Día Mundial de la Libertad de Prensa, IPYS Venezuela promueve su campaña
#QueNadieNosCalle, que comienza con un video testimonial de la periodista Alba
Cecilia Mujica, víctima de la censura en Globovisión en enero de 20
Prensa. Ipys.
Un
video testimonial de la periodista Alba Cecilia Mujica es el primero de la
serie Que nadie nos calle, concebida por el Instituto Prensa y Sociedad de
Venezuela, en la que se da cuenta de historias de violaciones a la libertad de
expresión relatadas en primera persona por las víctimas.
Conductora
del programa “Mujeres en todo” del canal televisivo Globovisión, Alba Cecilia
Mujica fue despedida de manera arbitraria el miércoles 17 de enero de 2018,
víctima de la censura interna del canal por opinar, al inicio de su programa
matutino, sobre la ejecución extrajudicial de Óscar Pérez, según denuncias que
han realizado diversas organizaciones de derechos humanos.
Esta
serie forma parte de una línea de trabajo que inició IPYS Venezuela con
“Crónicas insumisas” en febrero de este año, en la que se busca dar entidad a
las cifras que engrosan los registros diarios a agresiones verbales y físicas,
amenazas, censura, abusos de poder en contra de los periodistas y otras formas
de violaciones a su derecho de expresarse libremente.
Visibilizar
de una manera humana y directa estos casos ha sido la pauta de esta línea que
busca documentar casos emblemáticos, con miras a una futura justicia
transicional y reparación de víctimas. Y también a alertar a la ciudadanía en
torno a los peligros de vivir en una sociedad confinada al silencio.
82
casos de censura interna, que acumularon 104 violaciones en medios de
comunicación televisivos, radiales, impresos y digitales, registró Ipys
Venezuela entre 2014 y 2017, siendo 2014 el más crítico, con 56 casos. Un año
en el que se concretó la venta y el cambio editorial de varios medios, patrón
que derivó en la domesticacióny
silenciamiento de voces críticas, y la implantación de la desinformación.
Presiones
directas e indirectas promovidas desde el Estado y ejecutadas por organismos
públicos, funcionarios laicos, cuerpos de seguridad, grupos armados al margen
de la ley, medios cuyos propietarios se desconocen, y “ejércitos de troles”
creados desde el Ministerio Popular para la Comunicación e Información, forman
parte de la misma estrategia para crear estructuras y normativas
inconstitucionales, amenazar, agredir y limitar los derechos de los periodistas
y medios.Medidas que solo atienden al
deseo de perseguir a quienes se esfuerzan para mostrar lo que el Estado y sus
grupos de poder quieren que la sociedad calle.
En
el Índice de libertades periodísticas 2017, los encuestados refirieron el temor
a las agresiones de calle como una barrera para el ejercicio periodístico, así
como también las arbitrariedades de los cuerpos de seguridad del Estado durante
la cobertura informativa, que figuraron como los principales victimarios. Estos
hechos no fueron fortuitos: el sistema de monitoreo de IPYS Venezuela
contabilizó 507 violaciones por agresiones y ataques, la mayoría de ellos
ocurridos en el contexto de protestas. "Es importante no callar”,dice Alba Cecilia Mujica. “En Venezuela estamos viviendo momentos muy
difíciles y una de las cosas más terribles que podemos vivir los periodistas es
la autocensura".
Acerca
del Día Mundial de la Libertad de Prensa
El
3 de mayo de 1993 fue proclamado como el Día Mundial de la Libertad de Prensa
por la Asamblea General de las Naciones Unidas, siguiendo la Recomendación
adoptada durante la 26ª sesión de la Conferencia General de la Unesco, en 1991.
Esta
celebración es una ocasión para informar a los ciudadanos acerca de las
violaciones a la libertad de prensa, así como recordar que en decenas de países
alrededor del mundo las publicaciones son censuradas, algunas multadas,
suspendidas o anuladas, mientras que periodistas y editores son acosados,
atacados, detenidos e incluso asesinados.