Prensa. Efecto Cocuyo.
La
ONG de defensa de los derechos humanos, Provea, calificó la excarcelación de
los primeros 39 presos políticos en el país este viernes 1° de junio como el
resultado de las presiones nacionales e internacionales en contra del Gobierno
de Nicolás Maduro.
“La
libertad de los presos políticos es una medida positiva resultado de la presión
nacional e internacional. Debemos seguir exigiendo la libertad de todos y todas
las presas políticas y que cese la ‘rueda giratoria’, la dictadura libera a
unos y encarcela a otros”, afirmó la ONG.
Este
viernes comenzaron a ser sacados de sus centros de reclusión los primeros
presos políticos, entre los que destacan el exalcalde del municipio San
Cristóbal Daniel Ceballos, así como los acusados de atacar al diputado Teodoro
Campos en un acto de campaña en Catia (oeste de Caracas) del excandidato
presidencial Henri Falcón.
Provea
afirmó que “el Gobierno no reconoce ni reconocerá, que la libertad de los
presos políticos es consecuencia, entre otros aspectos, de la rebelión de los
presos políticos de El Helicoide, que días atrás dieron a conocer al mundo los
maltratos y torturas a los que son sometidos diariamente”, una de las
principales medidas que para la ONG obligó a dejarlos en libertad.
La
organización se refiere a la protesta que realizaron los presos políticos de El
Helicoide, quienes el 16 de mayo iniciaron una “toma” del centro de reclusión
originada por la golpiza recibida por Gregory Sanabria de parte de presos
comunes que se encontraban en esa sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia
Nacional (Sebin).
Desde
entonces, se logró que los reos comunes fueran trasladados a otras cárceles en
el país, mientras que las mujeres detenidas por razones políticas comenzaron
una huelga de hambre para exigir cesaran las violaciones a derechos humanos y se
diera la libertad de adolescentes, así como de personas que tenían boletas de
excarcelación por parte de tribunales, pero que el Sebin se negó a cumplir.
Provea
también citó al Foro Penal y aseguró que pese a estas 39 excarcelaciones, aún
quedan en centros peninenciarios del país un total de 318 presos políticos que
deberían estar en sus hogares y no prisioneros por su pensamiento político.
Además,
resaltaron que “muchos liberados el día de hoy ya poseían desde hace varios
meses boletas de excarcelación dictadas por diversos tribunales penales, sin
que las mismas fueran acatadas por las autoridades responsables de la custodia
de estos ciudadanos”.