Este viernes se
anunció a través de la red social Twitter la posible liberación del activista
favor de los derechos humanos Lorent Saleh, quien tiene cuatro años y un mes
privado de libertad. La noticia causó incertidumbre para sus familiares y
abogados quienes esperaban información en la sede del Servicio Bolivariano de
Inteligencia Nacional (Sebin) donde se encontraba recluido. Posteriormente, el
Gobierno Nacional comunicó su excarcelación mediante acuerdos de medidas
cautelares sustitutivas, motivo por el cual fue enviado a España tras su
delicada condición mental.
Prensa. La
Patilla.com
Saleh
fue detenido en 2014 tras ser deportado de Colombia por “actividades
proselitistas ilegales”, según informó la Cancillería del país vecino en ese
entonces. Fue puesto a la orden del Sebin y posteriormente fue acusado y
condenado por falsificación de documentos con la finalidad de entregarles
documentación venezolana a colombianos para que participen en protestas
violentas, realizar supuestas actividades paramilitares en Colombia y por
planear un presunto atentado en contra del Gobierno Bolivariano.
Desde
el momento de su detención se ha denunciado repetidas veces la violación a sus
derechos humanos. Sus familiares y abogados afirmaron que Lorent Saleh había
sido fuertemente torturado, se le negaba la atención médica y psiquiátrica, se
encontraba en condiciones precarias y con frecuencia no lo dejaban recibir
visitas; dejando a sus familiares sin saber de él por varios días. También
aseguran que sufrió de un aislamiento prolongado donde no le permitían el
contacto con otras personas y afirman que se intentó quitar la vida dos veces.
Las audiencias sobre su caso han sido diferidas por más de 40 veces.
Primeramente,
estuvo recluido en el Sebin con sede en Plaza Venezuela, Caracas, en un sótano
cinco metros bajo tierra denominado “La Tumba”. Luego fue trasladado a la sede
del organismo de seguridad en El Helicoide donde permaneció recluido hasta el
día hoy. En
el año 2015 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) dictó una
medidas cautelares de protección a favor de Saleh para que su vida e integridad
sean resguardadas tras una solicitud realizada por el Foro Penal. Fue
condecorado en 2017 con el premio Sájarov por el Parlamento Europeo, que fue
dedicado a los presos políticos enumerados por el Foro Penal de Venezuela.