Prensa.
FundaRedes.- Táchira.
Para
el dirigente gremial e integrante de la Fundación Redes, Ángel Molina, el
cierre de algunas sucursales y agencias bancarias públicas y privadas tanto en
San Cristóbal como en los municipios de la entidad, viene afectando la calidad
de vida de los ciudadanos y convirtiendo la realización de un trámite bancario
en un calvario.
“A
la crisis humanitaria severa que vivimos actualmente se suma otro factor, que
aunque parezca insignificante, tiene repercusión en la cotidianidad de la
población y es el cierre operativo y administrativo de algunas agencias
bancarias por diversas razones, bien sea por escasez de personal, cortes de
energía eléctrica, fallas en el sistema, entre otros, lo que genera una gran
cantidad de inconvenientes a los ciudadanos que tiene que movilizarse como
pueden y a veces hasta sin comer hasta la ciudad capital para poder hacer
cualquier transacción”, dijo Molina.
A
esto se le agrega- manifestó- la falta de cajeros automáticos operativos y de
dinero en efectivo que hace cada día más difícil la adquisición de bienes y
servicios, deviniendo en una violación sistemática de los Derechos Humanos de
la ciudadanía, como el derecho a la alimentación, transporte, servicios
públicos de calidad, entre otros.
“A
diario vemos desde tempranas horas de la mañana grandes colas de usuarios en
las afueras de las pocas agencias bancarias que aún funcionan en la entidad,
quienes además de tener que esperar horas para poder acceder a los servicios,
no reciben ni atención ni respuesta oportuna por parte de ninguna autoridad”,
aseguró el defensor de derechos humanos
No
contar con los requerimientos mínimos para una vida digna, cómo el hecho
anteriormente expuesto - dijo Molina- es producto de la precariedad y el
contexto opresivo al que régimen de Nicolás Maduro ha venido exponiendo y
sometiendo a la ciudadanía, asfixiándola hasta el punto de que un hecho tan
normal como ir al banco se convierta en una verdadera odisea, vulnerando sus
derechos fundamentales. Sonia Maldonado
CNP 7.996