Prensa.
Infobae.
El
régimen venezolano no ha evidenciado ninguna voluntad de atender la petición de
la Oficina de Derechos Humanos de la ONU de disolver la Fuerza de Acciones
Especiales (FAES) de la Policía Nacional o de acometer otras acciones para
prevenir ejecuciones extrajudiciales, según denunció este lunes Michelle
Bachelet ante la ONU.
La
alta comisionada presentó una "actualización oral" sobre la situación
de los derechos humanos en Venezuela, ante la 42ª sesión del Consejo de
Derechos Humanos. Allí, señaló que su organismo "ha seguido documentando
casos de posibles ejecuciones extrajudiciales cometidas por miembros de las
FAES en algunas zonas del país".
A
este respecto, hizo referencia a información recibida de la ONG Monitor de
Víctimas que identifica 57 nuevos casos de presuntas ejecuciones cometidas solo
en julio en Caracas.
"Estos
casos documentados revelan el mismo patrón identificado en mi informe de julio
y demuestran la falta de mecanismos de protección efectiva para los testigos y
familiares de las víctimas", denunció Bachelet. Lamentó que el chavismo,
en lugar haberse decidido a disolver las FAES y prevenir que continúen las
ejecuciones extrajudiciales.
"Por
el contrario, las FAES han recibido apoyo al más alto nivel del Gobierno",
denunció.
En
su informe julio, había exigido a Maduro: "Disuelva las FAES y establezca
un mecanismo nacional imparcial e independiente, con apoyo de la comunidad
internacional, para investigar las ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo
en el curso de operaciones de seguridad, asegurar que sus responsables rindan
cuentas, así como que las víctimas sean reparadas". Ahora, reclama que
nada de eso se cumplió.
Torturas
La
Oficina de la alta comisionada en Ginebra ha recibido del Ministerio Público de
Venezuela información general que indica que, entre agosto de 2017 y mayo de
2019, 104 miembros de las fuerzas de seguridad fueron condenados por
violaciones de derechos humanos. Sin embargo, todavía aguarda los detalles
sobre los tipos de violación, a qué institución pertenecían los responsables y
el perfil de las víctimas.
"Mi
Oficina documentó casos de tortura y malos tratos, tanto físicos como
psicológicos, de personas arbitrariamente privadas de su libertad, en
particular de militares", indicó. En ese sentido, señaló que las
condiciones de detención no cumplen con los estándares internacionales básicos
y las personas detenidas no tienen acceso a atención médica adecuada. Por ello,
solicitó tomar acciones para permitir acceso médico e investigar las
violaciones a los derechos humanos.
La
ex mandataria chilena mencionó el caso de Rafael Acosta Arévalo, quien murió
torturado bajo detención, y pidió castigo para los responsables. La ex
mandataria chilena mencionó el caso de Rafael Acosta Arévalo, quien murió
torturado bajo detención, y pidió castigo para los responsables.
Puntualmente,
también recordó el caso del capitán Rafael Acosta Arévalo, quien fue detenido
mientras ella visitaba el país y murió pocos días después bajo custodia, con
signos de tortura. "Aliento a las autoridades a que investiguen las
denuncias de tortura, castiguen a los responsables, reparen a las víctimas y
adopten medidas para evitar su repetición", expresó.
Crisis
económica
Bachelet
destacó que "la situación económica y social sigue deteriorándose
rápidamente", y consideró que la crisis hiperinflacionaria puede ser la
más aguda en la historia de la región. Según resaltó, el salario mínimo
equivale a dos dólares, menos de un tercio de los 7 que valía en junio, y la
economía se ha dolarizado de facto.
Al
respecto, reiteró sus preocupaciones por el potencial impacto de las sanciones
de Estados Unidos contra el régimen, ya que impactan en los programas sociales.
Pedido
de diálogo
La
funcionaria, además, mostró su apoyo a los procesos de negociación para superar
la crisis en el país, y puso a disposición los recursos de su oficina para
acompañar los esfuerzos entre el régimen y la oposición. Recientemente, el
chavismo amenazó con mantener congelado el diálogo.
"Reitero
mi llamado tanto al Gobierno como a la oposición para que superen sus
diferencias y den prioridad a la negociación que considero como la única manera
para poder superar la actual situación", expresó.
Ataques
contra indígenas
Asimismo,
Bachelet dijo que es preocupante el aumento de la presencia militar en el
territorio del pueblo indígena pemón (estado de Bolívar, fronterizo con Guyana
y Brasil), la violencia que ha sufrido y el caso de miembros de éste y otros
pueblos indígenas asentados en el territorio de Venezuela, supuestamente asesinados
por miembros de la Guardia Nacional Bolivariana.
Los
pemones venezolanos, que viven en la frontera con Brasil, han reclamado por el
ingreso de la ayuda humanitaria, bloqueada por el régimen.
Los
pemones venezolanos, que viven en la frontera con Brasil, han reclamado por el
ingreso de la ayuda humanitaria, bloqueada por el régimen. La comunidad pemón
ha sufrido además desplazamiento forzado con el fin de facilitar la extracción
minera en su zona de residencia.
(Con
información de EFE)