Prensa. Comstatrowland.
El
burnout es un trastorno emocional de creación reciente que está asociado con el
ámbito profesional, el estrés causado por el trabajo y el estilo de vida, el
cual hace que las personas se sientan agotadas física y mentalmente, tengan
pensamientos negativos y pierdan interés por las tareas que realizan.
Quienes
más presentan esta condición, conocida también como síndrome del “trabajador
quemado”, son aquellas adictas al trabajo (workaholic), con altos niveles de
exigencia, son idealistas, ansiosas, quieren hacer más y tienen alta
sensibilidad emocional, explicó la psicopedagoga Karina Paredes, en el marco
del taller: “Me preocupo o me ocupo”, realizado en el Grupo Médico Santa Paula
(GMSP).
Durante
su intervención, la psicopedagoga señaló que las personas con burnout tienen
además poca capacidad para resolver problemas o conflictos, y carecen de
recursos psicológicos para colocar límites y decir no. También tienen baja
autoestima y necesidad de hacer cosas por otros para sentirse valorados.
Paredes
explicó que el síndrome se manifiesta a nivel emocional, psicosomático,
conductual y cognitivo. Los síntomas más comunes son: ansiedad, distanciamiento
afectivo, fatiga crónica, dolor de cabeza, pérdida de peso, dolores
osteomusculares, frustración y en algunos casos depresión.
También
se manifiesta ausentismo laboral, tono de voz elevado, incapacidad para
relajarse, alto consumo de café, cigarrillos y fármacos, superficialidad en el
contacto con los demás, comportamientos de alto riesgo y aumento de conductas
violentas, entre otras cosas.
¿Qué
hacer?
Tecenvi
Abreu, directora técnica comercial de Proactiv Consultores señaló que es
importante poner atención a este síndrome, el cual fue incluido este año por la
Organización Mundial de la Salud (OMS) en el Manual de Clasificación de
Enfermedades, así como tomar medidas para evitar el riesgo de desarrollarlo.
Comentó
que la mayoría de los requerimientos que les hacen las empresas tienen que ver
con el manejo de actividades exigentes, de crisis, resiliencia, emociones e
inteligencia emocional, por lo decidieron aliarse con el GMSP para acompañar a
sus equipos de trabajo y saber qué hacer a la hora de seleccionar un programa y
abordaje.
Por
su parte, Leopoldo Quintero, director general del GMSP expresó que “hoy más que
nunca los líderes de empresas apoyados de sus departamentos de Gestión Humana,
tienen el importante papel de ayudar a sus colaboradores ofreciendo climas
organizacionales positivos y favorables, e introduciendo herramientas que
faciliten la gestión exitosa de las emociones presentes en sus empleados para
lograr un desempeño más exitoso”.
En
ese sentido, recalcó la importancia de cumplir con los chequeos médicos de
rutina y recordó que el GMSP tiene un programa de tutoriales, o estudios de
diagnósticos simplificados, que ofrece a
nivel empresarial y particular, a costos bastantes razonables para el cuidado
de la salud.
Líderes
conscientes
El
taller “Me preocupo o me ocupo” estuvo dirigido no sólo al personal del GMSP
sino también a líderes de otras empresas
que manejan el área de Capital Humano, con el fin de compartir experiencias y
reflexiones relacionadas con el agotamiento profesional.
Jennifer
Torres, especialista en Reclutamiento y Selección de Everest Service, señaló
que “el burnout es una enfermedad a la que todos estamos expuestos, con impacto
en nuestra vida profesional y personal. Por eso es importante recibir
información sobre cómo manejar esta condición, para prevenirla más fácilmente”.
Agregó
que dada la necesidad que existe hoy en día de mantener un trabajo, asegurar
ingresos y generar algunos extras, la gente se esfuerza y exige más de lo que
puede, razón por la cual aumentan los niveles de estrés de laboral. “Es muy
posible que se presente en un alto porcentaje y se desconozcan las razones”.
Mirna
Sánchez, gerente de Administración y Recursos Humanos de Comstat Rowland
Comunicaciones Estratégicas, comentó que “este tipo de iniciativas elevan
nuestra calidad de vida y sobre todo la salud laboral, aspecto importante hoy
día”.