Ahora la nave de Venezuela tiene marca de 1-1, al igual que México, mientras República Dominicana es líder invicto con 2-0. Puerto Rico posee 0-2. En la justa que se efectúa en el estadio Sonora en Hermosillo, México, los cuates colocaron en la loma a Mike Benacka (0-1) para el noveno.
El derecho salió rápidamente de César Suárez y Alex Romero, pero José Castillo consiguió pasaporte. Un wild pitch lo llevó a la intermedia, por lo que el zurdo Joe Thurston fue boleado intencionalmente. A continuación Mario Lissón al segundo envío despachó sencillo al centro para remolcar a Castillo con la de dejar en el campo a los mexicanos.
Ya Lissón en la entrada anterior había despachado vuelacerca solitario ante el estelar relevista Oscar Villarreal, para que luego Luis Núñez con doblete remolcara a Renny osuna con la rayita que empató las acciones tres anotaciones por bando. “Siempre esperé la recta en ambos turnos. Gracias a Dios las pude conectar bien en ambos casos y ayudé el equipo a ganar. Con el error que cometí me había sentido un poco mal, pero mis compañeros me dieron anímos”, resaltó el criollo.
Ese pecado a que se refería Lissón se produjo en el séptimo, cuando perdió un fuerte batazo de Bárbaro Cañizares, que pudo ser una doble matanza, pero que al final concretó dos anotaciones ante el abridor venezolano Ramón Ramírez, quien había trabajado bien en los primeros seis innings.
Venezuela se había ido arriba en el tercero con soberbio jonrón solitario por el left field de Robert Pérez, su séptimo en los clásicos caribeños. El veterano jardinero no hizo quedar mal a su compadre y mánager Luis Sojo. En el citado octavo le echó piernas y se embasó por infieldhit por tercera. Luego el corredor emergente Osuna anotaría. Ganó el zurdo Gabriel García (1-0), quien obligó a batear para doble matanza al también veterano Oscar Robles en la apertura del noveno.