El Departamento
de Justicia (DOJ) anunció el martes que un juez del Tribunal de Distrito de los
Estados Unidos para el Distrito de Nueva Jersey “emitió una orden” en la que
cancela el certificado de ciudadanía de una persona, lo que revoca su
ciudadanía y lo convierte en un residente permanente legal. El cambio lo puso
en riesgo de ser deportado.
Prensa. Mundo
Hispánico.
Baljinder
Singh, también conocido como Davinder Singh, es el primer afectado de la
“Operación Janus”, una acción conjunta del Departamento de Justicia y los
Servicios de Ciudadanía e Inmigración de los EE.UU. (USCIS). Esta intervención
se debe a que USCIS no habría usado los registros de huellas dactilares de
manera efectiva. Aquellos a quienes se les otorgó la ciudadanía sin registros
apropiados de huellas digitales antes de que estas fueran digitalizad as, ahora
pueden estar sujetos a la revocación de su ciudadanía.
La
Operación Janus comenzó porque el USCIS otorgó la ciudadanía a “por lo menos
858 individuos, a quienes se les ordenó deportación o les fueron retirados sus
documentos de identidad cuando, durante el proceso de naturalización, sus
registros de huellas digitales no estaban disponibles”, según un documento
publicado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y la Oficina del
Inspector General, en septiembre de 2016.
“Los
registros digitales no estaban disponibles porque, aunque los procedimientos de
USCIS requieren verificar las huellas dactilares de los solicitantes contra las
huellas dactilares del Departamento de Seguridad Nacional y del FBI, ninguna de
las agencias tenía todos los archivos de huellas previas a la digitalización
del proceso”, se explica en el documento. “No todos los registros antes de la
digitalización se incluyeron en el repositorio del DHS cuando éste se estaba
formando”.
Por
su parte, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas
en inglés) afirma haber identificado a casi 150,000 registros de huellas
dactilares anteriores a la digitalización “de extranjeros con órdenes de
deportación final o que son delincuentes o fugitivos”. Al registro del FBI le
faltan archivos porque “no todas las huellas tomadas durante los encuentros de
inmigración fueron enviadas al FBI”, informó el DHS.
El
Departamento de Justicia está investigando 315,000 casos en los que a las
personas se les otorgó la ciudadanía sin los datos adecuados de huellas
dactilares disponibles, y el USCIS tiene la intención de “referir
aproximadamente 1,600 casos adicionales para juicio”, informó el Departamento
de Justicia. El DOJ afirmó el martes que los casos en los que faltan datos de
huellas dactilares adecuadas pueden sugerir que los supervisados por USCIS
“buscaron eludir el registro de antecedentes penales y otras verificaciones en
el proceso de naturalización”.
En
el caso de Singh, nativo de la India, el Departamento de Justicia declaró que
éste llegó al aeropuerto internacional de San Francisco el 25 de septiembre de
1991, sin documentos de viaje ni prueba de identidad, alegando que se llamaba
“Davinder Singh”. Singh fue colocado en procedimientos de exclusión, pero no se
presentó para su audiencia en la corte de inmigración y se ordenó su
deportación el 7 de enero de 1992. El 6 de febrero de 1992, presentó una solicitud
de asilo con el nombre “Baljinder Singh “, según el DOJ, y “afirmó ser un indio
que ingresó a los Estados Unidos sin inspección”. Singh se naturalizó bajo el
nombre “Baljinder Singh” el 28 de julio de 2006.
El
DHS advirtió que “mientras los registros de huellas dactilares anteriores no se
habían digitalizado e incluido en los récords, el USCIS corrió el riesgo de
tomar decisiones de naturalización sin información completa y, como resultado,
se naturalizaron individuos que no podían ser elegibles para la ciudadanía o
que intentaron obtener la ciudadanía estadounidense en forma fraudulenta”. La
Operación Janus no presagia nada bueno para los miles de inmigrantes que
tuvieron que navegar por el complicado, largo y costoso sistema de inmigración
de los Estados Unidos.
Tal
como explicó el Consejo Estadounidense de Inmigración en una hoja de datos de
agosto de 2016, la inmigración a los Estados Unidos de manera temporal o
permanente se limita a tres rutas: empleo, reunificación familiar y protección
humanitaria, todos estos objetivos están siendo atacados por la administración
de Trump. Cada una de estas rutas están “altamente reguladas y sujetas a
limitaciones numéricas y requisitos de elegibilidad”.