Columna. (Marlani Sánchez.
@marlanisanchez)
De la
misma manera como hay cosas que no deben decirse hay otras que no deben
escribirse. Esta tampoco era la columna. Era una peor. Pero la fuente no fue
que me dejó embarcada, sino que ya saben cómo son los historiadores y
cronistas, bueno, la semana que viene ha de ser. ¿Dije fuente? Sí, he buscado
una fuente, y de las buenas, para estas tristes líneas que cada vez tienen más
detractores, ¡cuánto he crecido! (Lo digo, tanto por haber buscado una fuente,
como por los detractores. Ahora mismo recuerdo a Dalí...). Por cierto que
siempre me dan ideas para que aquí las plasme, pero esa de "las mujeres
que usan boxer" ¡No tiene parangón!
Esta debe
ser como la tercera vez que me siento frente a la computadora a teclear sin un
tema. ¿Irresponsable? ¿Desfachatada? ¿Caradura? ¿Mediocre?. Ve, fácil es escribir
con investigación previa, con entrevista previa, con google previo, ¡eso sale
solito! ¡Así cualquiera! Ahora, ¡haga esta vaina pues! Siéntese a teclear sin
saber qué! Móntese en una tarima sin un discurso preparado, vaya a una
exposición sin haber estudiado, já ¡eso sí que es rudo! Claro que es preferible
no escribir nada, ese es el camino fácil que la mayoría hubiera escogido, lo
difícil es lo contrario. Y como yo siempre a mitad del camino salto pá la
trocha...pues aquí estoy haciendo esto.
Fácil es
no hacerlo, difícil el antónimo, (que maña la mía de siempre ponerle la tilde a
la primera i de "difícil", ya he corregido tres veces). Creo que ya
he llenado la cuota mínima de caracteres, si le meten una ilustración grande
habré llenado ese espacio, solo me falta pensar en un titular para esto,
insisto, no es fácil. ¡Diooos pude haber escrito del mentado fin de semana
largo! Ay, y ya dejen de preguntar: -"¿Qué vas a hacer el fin de semana
largo?" ¡Están monotemáticos!. Acabo de comunicarme con el editor, ustedes
no saben, pero hoy es jueves, y se llama cierre de edición, y se llama
"encochinamiento" (el mío) (solo para periodistas). Por cierto se
avecina nuestro día, el Día del Periodista cuando me entrevistan y no sé qué
decir siempre empiezo con "tenemos mucho que celebrar...", ya saben.
Es probable que escriba algo de eso, bueno, ese es el deber ser, en lo
profesional generalmente sigo el camino del "deber ser", enfatizo que
en lo profesional.
Saben que
probablemente empiece esas líneas dedicadas a nuestro Día de una manera que he
visualizado ya varias veces, ¿se acuerdan del Harlem Shake? Es que me pega con:
"...¡Con los periodistaaas!...". Iba a escribir del tuiter, esa
también queda pendiente (por cierto mi más reciente tuit a esta hora fue:
"Debo reconocer que estoy escribiendo demencias. Debo agradecerle a ese
editor. Él debe estar tanto o más loco que yo. Qué bueno. Otro afín". El
tuit ya fue retuiteado y respondido. (Mi ego y yo). Si mi cronista e
historiador no me falla, vamos pá esa.
Por
cierto, para que tengan una idea, cuando le planteé los tres (3) temas que
quiero tocar, y ya casi accediendo a la primera entrevista, sí, lo llamaron, lo
buscaron, no se pudo…aunque...antes de eso, ya yo con la grabadora encendida (a
los cronistas hay que grabarlos, hablan mucho) y habiéndole dicho ya que
comenzáramos -tras mirar al menos tres veces mi enorme reloj amarillo-, el
conocido profesor miró hacia los cuatro puntos cardinales, se me acercó y me
dijo en tono bajo y con una cara un tanto indescifrable; entre penita y
complicidad: Creo que este no es el sitio más indicado para hablar de eso. Yo
sonreí. Finalmente él también. Ahí se las dejo...¡ay Dios! ¡El titular! ¡Aún me
falta el titular!