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La cotización del dólar en el mercado
paralelo comenzó a desinflarse después del asueto de Carnaval, debido a una
menor demanda, coincidieron fuentes consultadas por El Estímulo. Después de las
festividades que dan inicio a la Cuaresma, casi todas las ofertas de divisas
por encima de los Bs 4.250 eran ignoradas. “Nadie compraba. Dos de las mesas de
dinero con operaciones grandes en Caracas estaban ofreciendo entre Bs 3.700 y
Bs 3.900 y aun así no hay transacciones”, dijo el 8 de marzo a El Estímulo una
fuente del sector que optó por el anonimato.
El poco interés comenzó a notarse el
viernes 3 de marzo, cuando el valor de la divisa cayó a Bs 4.158,77 luego de
haber alcanzado Bs 4.339,77 –su pico más alto del año–la jornada anterior. Desde
entonces el valor del dólar ha perdido Bs 1.228,03 para ubicarse en Bs 2.930,74
el lunes 13 de marzo o Bs 1.409,03 desde el 2 de marzo.
El tipo de cambio, que se forma en la
ciudad de Cúcuta (Colombia) y que día a día registra el portal DolarToday, ha
perdido terreno por volatilidad. “Aunque hay una caída en la demanda, en las
mesas de dinero volvió a subir el precio (martes 7) casi a Bs 4.000 como lo
reflejó el dólar Cúcuta, por lo que el mercado demuestra volatilidad”, señaló
otra de las fuentes consultadas.
La entrada en acción el 16 de enero de
casas de cambio en la frontera para la venta de pesos colombianos a una tasa de
4 pesos por bolívar, no tuvo los resultados esperados por las autoridades
venezolanas de bajar la presión sobre el dólar paralelo, ya que en Cúcuta se
compran los pesos que luego son cambiados a dólares.
El fracaso de esta medida –reconocida
por el gobernador de Táchira, José Gregorio Vielma Mora, uno de sus
propulsores- disparó la tasa que ahora se desinfla en un mercado en el que los
actores actúan con cautela a la espera de inminentes anuncios, alguno ya
desvelado por el propio mandatario regional hace tres semanas.
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Como cada marzo, mes en el que vence el
plazo para el pago del Impuesto sobre la Renta, podría suponerse que parte de
esta caída se explica en la necesidad de contar con una mayor disponibilidad de
bolívares para cumplir con la obligación tributaria. Si bien algunos
economistas sostienen que la fecha incide en una menor demanda de divisas,
otros sostienen que las personas jurídicas están registrando más pérdidas que
ganancias, y que por tanto el comportamiento bajista no debería responder a
razones de pago del ISLR.
Loa agentes económicos esperan que la
próxima semana el gobierno dé a conocer alguna acción con la que pretenderá
corregir el fallido intento de vender 4 pesos por bolívar para calmar las
presiones del mercado. En Colombia el bolívar incluso perdió valor frente al
peso y en la mañana del lunes 13 de marzo el tipo de cambio era de 0,73 pesos.
Justo el día en que se cumplía un mes
del inicio de la venta de pesos por parte dew Italcambio –única firma
autorizada para reactivar operaciones fronterizas–, Vielma Mora asomó la
posibilidad de llevar la tasa a 1,5 pesos por bolívar, supuestamente para beneficiar
a un mayor número de personas naturales y desalentar la corrupción.
“La gente está esperando a ver qué pasa
la venidera semana y el mercado se congela”, dijo un agente cambiario de la
frontera. Se trata de un factor de expectativas, concluyó.
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