Prensa. EFE.
La
opositora María Corina Machado afirmó este domingo que el reconocimiento
directo o indirecto de la Asamblea Nacional Constituyente por parte de los
gobernadores electos de la oposición en los comicios regionales del 15 de
octubre sería una traición a la ciudadanía
“Un
gobernador NO PUEDE reconocer -ni directa,ni indirectamente- a la constituyente
cubana. Eso sería traicionar la lucha ciudadana”, escribió Machado en su cuenta
de Twitter, un día después de que se conociera que los cinco gobernadores
electos de la oposición barajan juramentarse ante la Constituyente tal y como
les exige el Gobierno.
“Éste
fue el propósito de las ‘elecciones’: imponer la ‘subordinación’ de la
oposición a la fraudulenta constituyente CUBANA”, escribió la exdiputada en la
red social, en referencia a la supuesta naturaleza totalitaria y comunista de
este suprapoder.
La
gobernadora electa de la oposición en el estado occidental del Táchira, Laidy
Gómez, anunció ayer que ella y el resto de candidatos opositores que se
impusieron el pasado domingo en sus regiones están consultando con la sociedad
civil si juramentarse ante la Constituyente.
Una
disposición publicada en la Gaceta Oficial confirmó esta semana lo ya
adelantado por el oficialismo: que los gobernadores opositores no podrán tomar
posesión de su cargo si no se juramentan ante una Constituyente que no
reconocen, y de la que ya han prestado juramento sus homólogos chavistas.
“No
hay nada que consultar a la gente sobre la ANC: en la calle y con los votos -el
#16J-,el pueblo habló. Y habló claro: NO la reconocemos”, dijo Machado,
refiriéndose a los más de 7,5 millones de personas que rechazaron la
Constituyente en el referendo convocado por la oposición el 16 de julio.
Decenas
de personas murieron en protestas callejeras contra la Constituyente antes de
que se instalara en el mes de agosto. La dirigente del partido Vente Venezuela
está inhabilitada para ejercer cargos públicos y estaba en contra de participar
en las elecciones regionales del domingo, al considerar que no se daban las
condiciones mínimas para que la oposición concurriera con garantías.
El
chavismo gobernante se impuso en 18 de los 23 estados, según unos resultados
calificados de “fraudulentos” por la oposición, que ha denunciado numerosas
irregularidades y manipulaciones de las cifras reales durante el proceso.