Prensa.
Reuters
Venezuela
dejó vencer en la primera quincena de octubre, un canje acordado con el banco
de inversión alemán Deutsche Bank, cuya garantía sumaba 1.700 millones de
dólares por lingotes de oro, informó el lunes un diputado opositor
familiarizado con la operación. En vísperas de pesados pagos de deuda externa,
el Banco Central de Venezuela (BCV) debía cancelar unos 1.200 millones de
dólares al banco alemán para recuperar el oro que permanecía como garantía de
este préstamo.
“Venezuela
no les pagó”, afirmó Ángel Alvarado, diputado opositor del parlamento quien
explicó que obtuvo información de fuentes financieras y gubernamentales en
Inglaterra. “Venezuela decidió dejar vencer ese contrato”, agregó. Deutsche
Bank declinó contestar una solicitud de información hecha por Reuters. El BCV
tampoco respondió de inmediato a otra petición enviada por correo.
Tras
la decisión del Banco Central del país caribeño, el banco alemán puede ejecutar
el oro en garantía para obtener los 1.200 millones de dólares que prestó. En la
operación devolverá a Venezuela una diferencia de entre 400 millones y 500
millones de dólares que surge entre el préstamo que se pactó y el oro que
respaldaba la operación, apuntó el diputado.
Casi
un 75 por ciento de las reservas internacionales de Venezuela está en oro y el
instituto emisor había optado por no vender los lingotes sino usarlos como
garantía en operaciones financieras que aportaron liquidez tras la merma de los
ingresos petroleros. Pero el vencimiento del canje de oro llegó casi a la par
de los pagos por unos 3.500 millones de dólares que Venezuela y su petrolera
estatal PDVSA deben hacer entre octubre y noviembre de este año por el servicio
de deuda externa.
Desde
inicios de octubre Venezuela comenzó a demorar los pagos en intereses, sin aún
dar explicaciones, aprovechando que cuenta con un período de gracia para
cumplir con algunos de esos compromisos. Los precios de los bonos de la deuda
venezolana retrocedían el lunes por el creciente temor en el mercado ante el
retraso en el pago de intereses, que ya suma unos 550 millones de dólares,
dijeron dos operadores consultados.
Meses
atrás, funcionarios de Deutsche Bank habían contactado de manera informal a la
Asamblea Nacional que controla la oposición para preguntar sobre las
implicaciones legales de renovar el canje, dijo Alvarado. En esas
conversaciones mostraron interés en prorrogar ese acuerdo, comentó. Desde el
Parlamento le pidieron a Deutsche Bank que presentara por escrito su petición,
pero nunca lo hizo. “Creemos que el Gobierno podía negociar mejor y salvar
parte del oro”, opinó Alvarado.