Los agricultores
y productores de alimentos estadounidenses tienen sus ojos fijos en Brasil.
Prensa.
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Para
2018 se esperan cerca de 7 millones de dólares en ventas de productos agrícolas
de Estados Unidos a Brasil, luego de la primera misión comercial del Servicio
Exterior Agrícola de Estados Unidos al país más grande de América del Sur. La
reciente expedición de cinco días a Brasil incluyó a 22 representantes de
empresas estadounidenses y grupos agrícolas estadounidenses, todos los cuales
se reunieron con sus contrapartes en las ciudades de Recife y Sao Paulo.
Brasil
tiene un importante potencial de mercado sin explotar para los exportadores
estadounidenses”, dijo Mark Slupek, funcionario del Servicio Exterior Agrícola
del Departamento de Agricultura de Estados Unidos. El crecimiento de la
población del país y el aumento de los ingresos per cápita, junto con el hecho
de que los consumidores brasileños tienen una alta consideración por los
productos y marcas estadounidenses, hacen de este mercado uno que vale la pena
explorar para los exportadores estadounidenses”.
Brasil
compró casi 1.400 millones de dólares a Estados Unidos en productos agrícolas y
afines en 2016. Las principales exportaciones de Estados Unidos a Brasil
incluyeron etanol, trigo, alimentos preparados y productos lácteos.
Listo
para el crecimiento: Carne de res fresca estadounidense. El primer envío de los
ganaderos estadounidenses (en inglés) llegó en 2017 después de un paréntesis de
14 años. Brasil prohibió que la carne de res estadounidense entrara al país en
2003, tras el descubrimiento de la enfermedad de las vacas locas (encefalopatía
espongiforme bovina) en cuatro vacas estadounidenses. La Organización Mundial
de Sanidad Animal (OMSA) calificó el riesgo de esa enfermedad en el ganado
bovino estadounidense como “insignificante” en 2013, la categoría más alta
disponible.
Estados
Unidos, el mayor productor mundial de carne de vacuno, comenzó a exportar carne
de vacuno estadounidense a China en 2017. “He
descubierto que cuando los individuos y las empresas quieren empezar a exportar
a un mercado en particular, a menudo no saben cómo y dónde empezar”, dijo
Slupek. “Aquí es donde nosotros [el Servicio Exterior Agrícola de Estados Unidos]
intervenimos para ayudar a hacer el trabajo”.