Prensa. Voanoticias.
La
organización no gubernamental Reporteros Sin Fronteras advirtió el miércoles de
que la creciente hostilidad contra los medios, alentada por algunos dirigentes
políticos y por el deseo de regímenes autoritarios de imponer su visión del
periodismo, constituye una amenaza para las democracias que también afecta a
Occidente.
Su
clasificación mundial de la libertad de prensa, que cada año analiza la
situación en 180 países, indica que el clima de odio es "cada vez más
marcado" y no exclusivo de naciones como Turquía, en el puesto 157, o
Egipto, en el 161.
Reporteros
Sin Fronteras destacó que Estados Unidos ha descendido dos puestos, hasta el
45, en el primer año de mandato del presidente Donald Trump, que ha tachado
como "enemigo del pueblo estadounidense" a la prensa, ha intentado
impedir el acceso a la Casa Blanca a algunos periodistas y descalifica como
noticia falsa cualquier crítica a su política.
Para
analizar este informe y los términos utilizados, la Voz de América entrevistó a
Luis Botello, vicepresidente de Nuevas Iniciativas e Impacto en el Centro
Internacional para Periodistas con sede en Washington DC. Este experto advierte
que gran parte de este fenómeno está vinculado con las redes sociales y el uso
que se hace de ellas.
América
Latina
Reporteros
Sin Fronteras insiste en que en varios países latinoamericanos persisten
políticas autoritarias respecto a la prensa. Cuba, en el lugar 172, se mantiene
como el país peor calificado del continente, México (147) fue en 2017 el
segundo más mortífero del mundo, con 11 periodistas asesinados, y Venezuela, en
el puesto 143 y Ecuador experimentaron, respectivamente, la mayor caída y la
mayor subida de la zona, con cambios respectivos de seis y trece puestos.
Reporteros
Sin Fronteras advierte de que la frontera entre la violencia verbal y la física
es cada vez más tenue en países como Filipinas, y lamenta que el deterioro
general de la situación afecta incluso a los países nórdicos, tradicionalmente
los más respetuosos.
Aunque
Noruega y Suecia mantienen su primera y segunda posición, Finlandia cae a la
cuarta, por detrás de Holanda, perjudicada por un caso de amenaza al secreto de
las fuentes periodísticas. En
el otro extremo se sitúa de nuevo Corea del Norte, donde, aunque el uso de los
teléfonos inteligentes se ha generalizado, también lo ha hecho el drástico
control de las comunicaciones y de la intranet nacional.
RSF
advierte además de la creciente influencia de los llamados "hombres
fuertes". Rusia (148) bajo Vladímir Putin, según su análisis, extiende su red
de propaganda por el mundo gracias a sus medios de comunicación, como la cadena
de televisión RT, y la China de Xi Jinping exporta su modelo de control en
Asia.
Colaboración con la entrevista de
Gioconda Tapia Reynolds