Prensa.
Diario Las Américas.
La lucha contra la malaria sigue estancada en el
mundo y, pese a una ligera mejora en la tasa de mortalidad, dos millones más de
personas contrajeron la enfermedad en 2017, informó este lunes la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
Esos datos figuran en el Informe Mundial sobre el
Paludismo de 2018, que se refiere al año pasado y fue presentado este lunes en
Maputo por el director del Programa Global de la Malaria de la OMS, el
científico español Pedro Alonso, entre otros.
"Nadie debería morir de malaria. Pero el mundo
enfrenta una nueva realidad: a medida que el progreso se estanca, corremos el
riesgo de desperdiciar años de trabajo, inversión y éxito en la reducción del
número de personas que padecen la enfermedad", afirmó el director general
de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en el informe.
En América, la incidencia aumentó por el mayor
número de casos en Brasil, Nicaragua y, sobre todo, Venezuela. "Es notable
también el número de casos que estamos registrando en el continente americano,
como vemos en Venezuela, pero también en Brasil", apuntó Alonso.
"Venezuela está pasando por un momento de
dificultades políticas y económicas que están afectando el funcionamiento del
servicio de salud", remarcó el científico, al recordar que
"históricamente fue uno de los países que más avanzó en la lucha contra la
malaria". El estancamiento en la financiación de la lucha contra la
malaria es, según la OMS, uno de las principales lastres del progreso.
En 2107 se invirtieron unos 3.100 millones de
dólares en combatir ese mal, cifra que se mantuvo más o menos estable en los
últimos ocho años, pero que es insuficiente para lograr los objetivos de la
Estrategia Mundial Técnica contra la Malaria 2016-2030 (EMT). La EMT busca
reducir la incidencia de casos y mortalidad en un 40% en comparación con 2015,
para lo que haría falta aumentar la financiación anual en 6.600 millones de
dólares hasta 2020.
FUENTE: EFE