Prensa.
El Nuevo Herald.
El jefe de Estado de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó
que su Gobierno acompaña “con mucha atención” la situación política en
Venezuela y admitió que teme un proceso de transición no pacífico entre el
mandatario venezolano, Nicolás Maduro, y el autoproclamado presidente interino
Juan Guaidó.
“La historia nos ha mostrado que las dictaduras no
pasan el poder para la respectiva oposición de forma pacífica y nosotros
tememos las acciones del Gobierno, o mejor, de la dictadura de Maduro”, expresó
Bolsonaro en una entrevista con la cadena televisa Record.
Bolsonaro, quien está en Suiza para el Foro
Económico de Davos, reiteró que “Brasil se incluye” en el grupo de países que
siguieron los pasos de Estados Unidos y reconocieron la “legitimidad” del
“nuevo presidente que se presentó como líder en Venezuela”.
“Brasil acompaña con mucha atención y estamos en el
límite de lo que podemos hacer para restablecer la democracia en aquel país”,
declaró el mandatario.
Destacó además que “obviamente hay países fuertes”
dispuestos a otras iniciativas, en alusión a las declaraciones la víspera del
presidente estadounidense, Donald Trump, de que “todas las opciones están sobre
la mesa”, tras ser preguntado sobre si se plantea una intervención militar en
Venezuela.
La entrevista en esa cadena televisiva brasileña se
produjo horas después de que Bolsonaro y sus ministros de Economía, Paulo
Guedes, de Justicia, Sergio Moro, y de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo,
cancelasen una rueda de prensa que estaba prevista para la tarde del miércoles
en el Foro Económico Mundial.
El mandatario justificó que la cancelación se dio
debido a una “recomendación médica” de que debería regresar “descansado” a Sao
Paulo, donde será sometido a una cirugía “bastante compleja” para la retirada
de la bolsa de colostomía que le acompaña desde que fuera apuñalado durante un
mitin electoral el pasado septiembre.
En la entrevista, Bolsonaro hizo un balance positivo
de la participación de su país en Davos, afirmó que “todos están interesados en
Brasil” y que fue buscado “por varios líderes de Estado y varios empresarios”. “Brasil es visto con mucho cariño por parte de
empresarios y Gobiernos de todo el mundo y sentimos que ellos desean el bien de
Brasil”, dijo.
Preguntado sobre las sospechas que pesan contra su
hijo, el senador electo Flavio Bolsonaro, el jefe del Ejecutivo brasileño las
calificó como “acusaciones infundadas” y afirmó que “cree en su hijo”.
“Yo creo en él y la presión enorme en su contra es
para intentar afectarme a mí”, expresó Bolsonaro. Señaló que Flavio “viene explicando todo lo
que sucede en estas acusaciones infundadas” y aseguró que “nosotros (los
Bolsonaro) no estamos por encima de la ley”.
“Por lo contrario, estamos, como todos, bajo la ley.
Pero que se cumpla la ley, no la hagan de manera diferente para nosotros”,
subrayó. Flavio Bolsonaro, el hijo mayor del presidente brasileño, Jair
Bolsonaro, se ha visto salpicado en un caso que investiga movimientos bancarios
sospechosos de Fabricio Queiroz, quien fue empleado suyo durante su etapa como
diputado regional de Río de Janeiro.
No obstante, las sospechas en su contra se agravaron
después de que la Fiscalía de Río de Janeiro impulsara una operación para
arrestar a policías militarizados que comandaban milicias que actúan en la
capital fluminense y que, según la Fiscalía, podrían estar involucrados en el
asesinato de la concejala Marielle Franco.
De acuerdo con los medios brasileños, Flavio
Bolsonaro homenajeó en 2004 al mayor Ronald Paulo Alves Pereira, uno de los detenidos,
y estuvo vinculado con el capitán Adriano Magalhaes da Nóbrega, cuya madre y
mujer presuntamente trabajaron en el despacho del entonces diputado.