Prensa.
Voanoticias.
La
Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet,
condenó el miércoles la represión en Venezuela y dijo que el gobierno en
disputa de Nicolás Maduro no ha reconocido completamente la gravedad de la
crisis humanitaria.
Bachelet
dijo también en su discurso en la ONU que las sanciones pueden empeorar la
crisis que vive la nación. "La severidad (de la crisis) en temas de la
salud no han sido reconocidos por la autoridad y las medidas adoptadas han sido
insuficientes", dijo Bachelet durante su presentación ante el Consejo de
Derechos Humanos de la ONU.
Aludió
a que las fuerzas de seguridad que responden a Maduro, con el respaldo de
milicias progubernamentales, han reprimido a la oposición pacífica haciendo uso
excesivo de la fuerza.
"Me
preocupa el recorte del espacio social y la criminalización de las protestas en
el contexto del aumento de las protestas antigubernamentales este año, pero
también han habido abusos de derechos humanos de parte de los grupos seguridad,
los colectivos armados", dijo.
Bachelet
reconoció que estos hechos están provocando muertes y torturas que han sido
documentadas por su oficina. También expresó su preocupación porque las
recientes sanciones de EE.UU. a las transferencias financieras vinculadas a la
venta de petróleo venezolano "puedan contribuir a agravar la crisis
económica".
El
gobierno en disputa de Venezuela afirma que las sanciones de Estados Unidos,
que congelaron 30.000 millones de activos del país, le impiden importar
productos de primera necesidad, incluyendo medicinas.
Bachelet
preocupada por consecuencias del apagón
La
funcionaria encargada de los derechos humanos en la ONU mostró preocupación por
el apagón ocurrido días atrás, dejando a millones de venezolanos buscando
comida y agua para sobrevivir.
"La
extensión del daño y de las víctimas aún no se conoce. Un apagón largo
demuestra los desafíos que enfrenta Venezuela", dijo en referencia al
colapso del transporte y otros servicios básicos durante el apagón.
También
se refirió a la situación de los niños, muchos de los cuales, -explicó-, no
pueden ir a la escuela por falta de alimentos, transporte público y de falta de
maestros profesionales que se han exiliado.
"Si
bien esta crisis económica y social empezó antes del momento de las sanciones
de 2013, me preocupa que las sanciones relacionadas con la transferencia de
petróleo siga agravando la situación con repercusiones sobre la gente y los
derechos civiles", dijo.
Bachelet
explicó que su oficina sigue investigando informes de posibles asesinatos
extrajudiciales y aludió a reportes de por lo menos 205 personas que habrían
sido asesinadas durante enero de 2017 en Caracas. Las
víctimas, dijo, han alegado que se niegan a participar en la investigación en
contra la fuerza de seguridad por temor a represalias.
"Estoy
particularmente preocupada de la restricción de prensa en Venezuela y los
alegatos de que se usó la ley para perseguir a periodistas, a líderes de la oposición
(...) esto ha tenido un impacto para el acceso de la gente a la
información", expresó. Comentó sobre el éxodo de millones de venezolanos
que huyen del país para escapar de la crisis.