Este miércoles, Francisco Santos señaló que el compromiso para sentarse a negociar se empezó a gestar en un "encuentro exploratorio" entre el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas) el 23 de febrero en La Habana.
Los delegados de ambas partes, que no están identificados en el texto, pactaron "iniciar conversaciones directas e ininterrumpidas" sobre la agenda "con el fin de alcanzar un Acuerdo Final para la terminación del conflicto" colombiano, que dura casi medio siglo, siempre según el documento leído por Santos, vicepresidente en el anterior ejecutivo de Álvaro Uribe (2002-2010).
La mesa de conversaciones se instalará públicamente en Oslo un mes después de que se haga el anuncio público, aunque su sede principal será La Habana y se "podrán hacer reuniones en otros países", según el documento. Los diálogos tendrán el "apoyo de los gobiernos de Cuba y Noruega como garantes y los gobiernos de Venezuela y Chile como acompañantes. De acuerdo con las necesidades del proceso se podrá de común acuerdo invitar a otros", señaló.