Prensa. Ateneo de San Fernando/ Iván Pérez.
La Cultura en todas sus
modalidades guarda estrecha relación con la educación, la creación, el
esparcimiento, factores que inciden en el quehacer diario del hombre y que se
constituyen en una necesidad para la formación de individuos aptos para el goce
de una verdadera identidad donde esté presente su gentilicio y les permita
querer, rescatar, preservar sus costumbres, tradiciones y valores Artísticos
Culturales, respectivamente; con esta misión fue que se trasladó el Ateneo San
Fernando al Liceo Bolivariano “San Fernando” el pasado 16 de octubre del
presente año; haciendo realidad dicho traslado a través de un colectivo o taller sobre “El Origen y Ejecución del
Joropo Venezolano” el cual tuvo como facilitador al reconocido cultor apureño,
Prof. Espc. Elvis García, coordinador de Danzas del ateneo y fue impartido a
alumnos de ciclo diversificado y especialista de cultura de tan importante casa
de estudios.
Cabe destacar, que se mención
que el Joropo que con su baile y música identifica plenamente al venezolano. Su
origen proviene del Fandango español y la música melismática (un grupo de notas
cantadas sobre una misma sílaba) árabe. Ahora bien el origen de la palabra
Joropo relatan que proviene de "xarop", palabra árabe que significa
jarabe. Se piensa además que el joropo proviene del viejo continente, pues
posee formas y maneras afines al flamenco y a otros bailes andaluces. Esta
semejanza se debe a la fusión cultural que se dio en Venezuela para la época de
la colonización.
Es así como el Joropo se
caracteriza por ser un sistema de estructuras cristalizadas a lo largo de la
historia a partir de canciones y bailes tradicionales que se erigieron en
formas musicales, sirviendo como base para a variantes en la letra, o
convirtiéndose en formas puramente instrumentales. Los principales géneros se
denominan Golpes (bailes rápidas) y Pasajes o Tonadas (canciones lentas).Entre
ellos figuran el Zumba que zumba, la Chipola, el Gabán, el Gavilán, el
Pajarillo, el Seis por Derecho, los Merecures, el Seis Numerao, la Catira, la
Guacharaca, la Periquera, el Nuevo Callao, el Carnaval, el San Rafael, el
Quitapesares, entre otros y sus diversas combinaciones. Diversos documentos
coinciden en que el joropo se presenta en cinco variantes que se extienden en
el territorio nacional, las cuales poseen una identidad y una particularidad en
cada uno de estos espacios geográficos donde se desarrollan, tal es el caso de
las variantes que se presentan a continuación: Joropo Llanero, Joropo Tuyero o
central, Joropo Oriental, Joropo guayanés, Golpe tocuyano o joropo larense.
En consecuencia las costumbres
y las tradiciones constituyen algunas de las fuentes de la historia de un país,
el valor de la identidad nacional es responsabilidad de todos, y aun cuando los
novedosos avances tecnológicos y el acelerado ritmo de vida condicionan y
limitan el valor de lo que realmente es nuestro, se debe trabajar sin descanso
en fomentar los valores culturales que lamentablemente están en constante
amenaza por el inevitable proceso de globalización y transculturación.
Es por ello, que el docente
tiene la gran responsabilidad de transmitir al educando valores de identidad
regional, local, utilizando de manera dinámica la práctica del baile de Joropo
y cantos autóctonos, promoviendo así la permanencia de esta costumbre y que se
constituya de manera permanente como expresión colectiva cultural popular del
estado apure y que a su vez esta fortalezca el gentilicio del apureño.