Prensa.
Diario Meridiano.
Lionel
Messi, el Leo Messi del Barcelona, "reapareció" en Maracaná, el mejor
escenario posible y, con un tanto antológico, confirmó al primera victoria de
Argentina en el Mundial de Brasil, ante Bosnia, un rival que le allanó el
camino con un autogol nada más empezar, pero nunca se dio por vencida.
Ocho
años después, Messi volvió a marcar en un Mundial
Ocho
años -menos un día- después, Messi volvió a marcar en un Mundial. Tras muchos
meses intentándolo, encontró la jugada que buscaba y recuperó la sonrisa. Lo
hizo, además, cuando sus compatriotas trataban de acallar a la parte de la
hinchada brasileña presente en Maracaná que le insultaba.
La
reaparición del astro argentino, ausente durante toda la temporada, fue la gran
noticia de una gris victoria argentina ante un rival que pagó la novatada.
Con
el Maracaná convertido en una olla albiceleste, la selección de Alejandro
Sabella no dejó buenas sensaciones. Inconexa y con una alarmante falta de
chispa en muchos de los jugadores que deben alimentar el sueño del
tricampeonato.
Tampoco
ayudó el diseño del técnico. En la selección que cuenta con la mejor nómina de
atacantes del mundo, Sabella plagó el campo de defensas, con la inclusión del
zaguero del Inter Hugo Campagnaro. La idea era abrir las bandas con Pablo
Zabaleta y Marcos Rojo, pero no lo consiguió.
Si
se fue al descanso con ventaja fue porque al rival le pesó el debut.
Bosnia-Hercegovina, una novata que carga con el peso de representar a un país
joven, entró al campo como un flan.
Impresionada
por el escenario y la entidad del rival, introdujo en su meta el primer balón
que llegó a su área, una falta botada por Messi que peinó Marcos Rojo y rechazó
contra su meta Sead Kolasinac (m.3).
Con
el marcador a favor y, sin más plan de juego que aguardar algún destello de sus
estrellas, la Albiceleste se fue diluyendo conforme avanzó el primer tiempo.
Messi no conectó con Agüero, Di María vagó sin rumbo y a Mascherano y Maxi
Rodríguez no dieron ni con el ritmo.
Por
eso, no necesitó mucho Bosnia para ir creciendo hasta poner en apuros a Sergio
Romero, pleno de reflejos en un remate de cabeza de Senad Lulic (m.40).
De
Messi, mientras, no hubo más noticias hasta el minuto 45 cuando, con un regate
seco y corto en el interior del área, comenzó a recordar al jugador que añoran
en Barcelona y aún esperan recuperar en Argentina.
Que
Gonzalo Higuaín y Fernando Gago entrasen en el campo tras el descanso, no fue
más que la consecuencia del lógico cambio de planes de Sabella.
Messi
buscó el balón más alejado del área y, al final, encontró la jugada que quería.
Esa carrera con el balón pegado, al pie, esa pared con Higuaín, para recorrer
el borde del área hasta encontrar el hueco por el que ajustar la pelota junto
al poste, imposible para cualquier arquero.
La
respuesta de Bosnia fue meritoria, porque lejos de bajar los brazos frente a la
euforia albiceleste buscó el gol y lo encontró por medio de Vedad Ibisevic
(m.85).
Lo
intentó, pero no tuvo más recursos y salió satisfecha por plantar cara. Como la
afición argentina, que pese al juego del equipo, sabe que Messi vuelve a ser
protagonista. Que ha anunciado su regreso.
-
Ficha técnica:
2
- Argentina: Romero; Zabaleta, Campagnaro (Gago, m.46), Federico Fernández,
Garay, Marcos Rojo; Maxi Rodríguez (Higuaín, m.46), Mascherano, Di María;
Agüero (Lucas Biglia, m.87), Messi.
Seleccionador:
Alejandro Sabella.
1
- Bosnia: Begovic; Mujdza (Ibisevic, m.69), Bicakcic, Spahic, Kolasinac; Besic,
Hajrovic (Visca, m.71), Pjanic, Misimovic (Mendujanin, m.74), Lulic; Dzeko.
Seleccionador:
Safet Susic.
Goles:
1-0, m.3: Kolasinac en propia puerta. 2-0, m.65: Messi. 2-1, m.85: Ibisevic.
Árbitro:
Joel Aguilar (El Salvador). Amonestó al argentino Marcos Rojo y al bosnio
Spahic.
Incidencias:
Partido de la primera jornada del Grupo F disputado en el estadio de Maracaná,
ante 74.738 espectadores. / EFE
Seferovic sella
la remontada de Suiza.
Haris
Seferovic anotó en los descuentos y Suiza superó el domingo 2-1 a Ecuador en el
debut de ambos en esta Copa del Mundo.
Seferovic
coronó un fulminante contragolpe para marcar en el último suspiro de los tres
minutos de descuentos que otorgó el árbitro Ravshan Irmatov.
"Ese
error del último minuto nos costó el juego", señaló el técnico de Ecuador,
Reinaldo Rueda. "Un resultado inmerecido por lo que se hizo en la
cancha".
Enner
Valencia abrió la cuenta por Ecuador con un gol de cabeza a los 21 minutos, y
Admir Mehmedi igualó a los 48.
Suiza
quedó como líder del Grupo E con tres puntos. Francia y Honduras jugaban más
tarde por el mismo sector.
"Pecamos,
tres minutos que había que controlar el juego. Si no podíamos ganar, era buscar
el empate. Nos desordenamos en el último minuto", apuntó el colombiano
Rueda, quien condujo a la selección hondureña en el pasado Mundial de
Sudáfrica.
"Un
rival difícil. Cada partido es diferente hay que levantar la cabeza",
analizó Rueda.
Valencia,
campeón goleador del pasado torneo mexicano con el Pachuca, se elevó en el
corazón del área y remató de cabeza una falta cobrada por Jefferson Montero.
Mehmedi
igualó por los suizos de cabeza, en un partido en el que imperó el vértigo
sobre el orden táctico.
"Por
ahí se hicieron las cosas bien, pero hay que seguir mejorando", apuntó Valencia.
Los Galos sin
despeinarse cumplen en su debut
Karim
Benzema, criticado en Francia en muchas fases de su carrera, cerró heridas con
la afición de su país tras firmar dos de los tres goles de su equipo a Honduras
en un partido en el que el cerrojo centroamericano no fue un obstáculo para el
delantero del Real Madrid.
Benzema
fue el hombre del partido. Aún así, le costó, como le cuesta en su club, donde
a veces es capaz de brillar como el que más y otras se esconde para no aparecer
en muchos partidos. En su estreno mundialista estuvo desaparecido durante casi
toda la primera parte. Fue su primera versión. Después, apareció la segunda, la
mejor, la que le ha dado fama y con la que acabó con la resistencia de su
primer rival en Brasil.
Y
es que la aventura de Honduras, en su segundo Mundial consecutivo, comenzó en
un estadio, el Beira Rio de Porto Alegre, en el que no llegaron a sonar los
himnos de los dos países protagonistas. Fue un síntoma de descontrol que
posteriormente no afectó a los hombres de Didier Deschamps y sí a los de Luis
Fernando Suárez.
El
cuadro centroamericano pasó una semana dándole vueltas a una posible
insinuación de Francia de que su juego era violento. Perdió el tiempo en una
historia sin importancia que, sin embargo, estuvo relacionada con el devenir
del choque.
Fue
Francia la que siempre tuvo el control. Nunca dejó a Honduras acercarse a la
portería de su capitán, Hugo Lloris, que en la primera parte no recibió ningún
disparo entre los tres palos. Vivió una tarde plácida, seguramente inédita en
su carrera.
Desde
su área, Lloris contempló como sus compañeros se hicieron con el balón y no lo
soltaron. Casi todo el peso del juego lo llevó Mathieu Valbuena, que estuvo
excepcional y omnipresente durante casi todo el partido.
Sin
Franck Ribery, el único futbolista que perturbó la convivencia de una selección
que es una balsa de aceite comparada con la del Mundial de Sudáfrica, Valbuena
tomó el mando con mucha clase.
Él,
junto al lateral derecho Mathieu Debuchy, protagonizaron casi todas las jugadas
de ataque de Francia en los primeros 45 minutos. Arriba, Karim Benzema y
Antoine Griezmann, que sentó a Olivier Giroud en el banquillo, tenían menos
protagonismo. Sobre todo el jugador del Real Madrid, que parecía que iba a
alimentar más su leyenda de futbolista indolente hasta que marcó el primer
tanto del duelo, de penalti, justo antes del descanso. Ahí comenzó a funcionar.
Antes,
el propio Griezmann mandó un cabezazo al travesaño tras un buen servicio de
Patrice Evra y Blaise Matuidi se encontró con Noel Valladares y el larguero
justo después de un disparo peligroso. El tanto de Benzema, por el dominio de
Francia, fue justo.
La
clave violenta, aquella que Honduras dijo que Francia insinuaba, apareció en
dos jugadas entre Paul Pogba y Wilson Palacios que fueron determinantes. En la
primera, Pogba fue objeto de una falta por parte del hondureño, que remató con
dos patadas al futbolista del Juventus. El carácter indomable del joven
futbolista hizo que se revolviera para patear a su rival. Los dos vieron
amarilla.
Después,
en el minuto clave, el 44, Palacios vio su segunda tarjeta tras cometer un
penalti sobre Pogba que parecía claro. Benzema, desaparecido hasta ese
instante, no falló desde los once metros, derribó el muro de Honduras y,
Francia, con un jugador más, se marchó al vestuario con la tranquilidad de
quien se sabe ganador.
El
conjunto galo comenzó la segunda parte como terminó la primera, con el control
del duelo y con ocasiones. Para desgracia de Honduras, con un hombre menos, la
primera de ellas acabó dentro de su portería. El protagonista de nuevo fue
Benzema, que remató al poste una pelota que se introdujo en la portería
Valladares.
Por
primera vez en la historia se utilizó la tecnología de gol que ha implantado la
FIFA. En los marcadores, como en el tenis, pudo verse cómo la pelota atravesó
la línea de la portería. Se despejaron las dudas y Benzema, inédito hasta casi
el final del acto inicial, comenzó a dar su recital hasta convertirse en uno de
los mejores.
Le
costó al futbolista del Real Madrid, pero al final se consagró y acabó con los
debates que en Francia han hecho dudar de su figura. Lo hizo definitivamente en
el minuto 72, con un trallazo desde dentro del área que cerró cualquier herida.
Su tanto selló un marcador con el que Francia agarró el liderato del grupo E y
dejó a los catrachos tocados.
-
Ficha técnica:
3
- Francia: Lloris; Debuchy, Varane, Sakho, Evra; Matuidi, Pogba (Sissoko,
m.57), Cabaye (Mavuba, m.65); Valbuena (Giroud, m.78), Griezmann y Benzema.
Seleccionador:
Didier Deschamps.
0
- Honduras: Valladares; Beckeles, Bernárdez (Chávez, m.46), Figueroa,
Izaguirre; Najar (Claros, m.58), Wilson Palacios, Garrido, Espinoza; Bengston
(Boniek, m.46) y Costly.
Seleccionador:
Luis Suárez.
Goles:
1-0, m.45: Benzema, de penalti. 2-0, m.48: Valladares, en propia puerta. 3-0,
m.73: Benzema.
Árbitro:
Sandro Ricci (Brasil). Amonestó a Evra (m.7), Pogba (m.28) y a Cabaye (m.45+2),
por parte de Francia. También a Boniek (m. 53) y Garrido (m.64), por parte de
Honduras. Expulsó con doble amonestación al hondureño Wilson Palacios (m. 28 y
43).
Incidencias:
Partido correspondiente a la primera jornada del grupo E disputado en el
estadio Beira-Rio de Porto Alegre ante cerca de 42.000 espectadores. /EFE