Prensa. Diario
El Nacional.
El
rezago tecnológico de la Cantv limita el desarrollo de las demás empresas del
sector porque es la de mayor infraestructura instalada, afirmaron
CARMEN
SOFÍA ALFONZO A. CALFONZO@EL-NACIONAL.COM
“Las
asignaciones en divisas han sido sumamente limitadas en lo que va de año”. La
afirmación bien podría describir la situación de muchos sectores de la
economía, pero corresponde a Patricia Valladares, presidenta de la Cámara de
Servicios de Telecomunicaciones. Los retardos en la entrega de dólares para la
industria tendrán consecuencias que los usuarios padecerán con respecto a sus
posibilidades de acceso a equipos de comunicación y nuevas tecnologías.
Una consulta con fuentes de alto nivel
en el sector permite hacer pronósticos del desempeño con el cual cerrarán el
año las operadoras de telecomunicaciones. Un ejecutivo consultado comenzó su
análisis con esta frase: “Si faltan alimentos y medicinas no debería sorprender
que no haya celulares en los establecimientos formales de ventas”. Los cálculos
que maneja no son promisorios: anticipa que al cierre de 2014 las ventas de
móviles habrán tenido una caída de 90%. “El año pasado las compañías solo
aportaron al mercado 20% de los equipos debido a la escasez de dólares, pero
este año será peor. Creemos que no pasará de 10%”, advirtió.
Las dificultades en el mercado de
teléfonos celulares fueron reconocidas incluso por Manuel Fernández, ministro
de Ciencia, Tecnología e Innovación y presidente de la Cantv. En un encuentro
con periodistas realizado en mayo admitió la existencia de “desequilibrios” en
la oferta y no quiso dar un pronóstico de cuándo se solucionarían: “Sería una
temeridad”.
Conocedores del negocio de la
importación consideran que el mercado nacional demanda entre 8 y 10 millones de
equipos al año.
La industria de telecomunicaciones es
intensiva en las necesidades de capital. Se calcula que en el caso venezolano
requiere entre 1 y 1,5 millardos de dólares anuales para operar. Los actores
del mercado calculan que la inversión en el sector ha descendido entre 30% y
50% desde 2011 por falta de divisas. Para 2014 las proyecciones no son mejores.
El entrevistado calcula que al cierre del año el desembolso no irá más allá de
400 millones de dólares. Es decir, apenas 26% del requerimiento anual.
Detrás de Bolivia
El desarrollo de las telecomunicaciones
en el país depende en gran medida de la Cantv, debido a que esa empresa es la
más grande del sector y la que tiene la mayor infraestructura instalada. Los
analistas han advertido que la compañía –que pasó a manos del Estado en 2007–
sufre un proceso de rezago tecnológico que también ha limitado el crecimiento
de la industria.
Una fuente de la corporación estatal
confirma la situación de atraso y la atribuye precisamente a la reducción
drástica de inversiones en los últimos cinco años. La creación de la Gerencia
de Transición al Socialismo es asociada por empleados y exempleados de la
empresa como un hito en el proceso de rezago.
“En los primeros dos años como empresa
pública no hubo muchos cambios en la forma de conducirla. Fue en 2009 cuando
instalaron la dependencia, cuando se profundizó la politización y el personal
calificado y conocedor de la industria fue sustituido por personas afectas al
gobierno, sin experiencia en el área y que dejaron de lado los proyectos
programados”, dijo el informante.
Antes de ser estatizada la Cantv, desde
el punto de vista tecnológico Venezuela ocupaba los primeros lugares de
innovación en Latinoamérica, pero ahora está en las últimas posiciones.
La velocidad de banda ancha es un
ejemplo del rezago. La Cantv es capaz de proveer 2 megas de navegación, pero en
países como Bolivia, Nicaragua y Guatemala, cuyas economías son más pobres que
la venezolana, cuentan con 10 megas de velocidad.
“Ese es el promedio de navegación en
América Latina. Aquí solo Inter lo ofrece, pero en algunas zonas porque la
falta de divisas y de respaldo de Cantv impide expandir el servicio”, dijo una
fuente vinculada al sector de televisión por suscripciones.
Movilnet, también del Estado desde 2007,
es otra muestra del atraso: ofrece las tecnologías más viejas GSM y CDMA. Las
otras dos operadoras de telefonía móvil brindan G3 e incursionan en G4.
“Mientras que esta es nuestra realidad,
en Ecuador hay G4 en todo el país. La falta de divisas impide masificar esa
tecnología aquí”, aseveró la fuente.
Solo en bolívares
El carácter de estatal no excluye a la
Cantv de la escasez de divisas. La fuente de la empresa dijo que los proyectos
en dólares son desestimados en la compañía y que solo aceptan ejecutar los que
están calculados en bolívares, “aunque salga más caro”.
“Si planificamos, por ejemplo, instalar
10 antenas solo podemos colocar la mitad porque en bolívares el proyecto se
duplica o triplica”, agregó la fuente.
Tampoco hay dólares para pagar las
deudas, aseguró un trabajador de la empresa. Dijo que era difícil calcular el
compromiso de la compañía con los proveedores internacionales porque son
alrededor de 150 en total. Pero indicó que entre los 5 y 6 más grandes, al que
menos le deben desde hace 5 años aproximadamente, el monto ronda 70 millones de
dólares.
"Para paliar huecos de la
inflación"
A partir del 5 de julio entró en
vigencia el incremento de tarifas que autorizó la Comisión Nacional de
Telecomunicaciones a las empresas de telefonía fija y móvil. En promedio, entre
todas las compañías y servicios, el aumento es de 25%.
Fuentes consultadas afirmaron que el
alza no contribuirá a subir el nivel de inversión de la industria. Una de las
fuentes explicó que, en primer lugar, no servirá para atacar la desinversión
porque el grueso de los desembolsos que exige el sector es en dólares y, en
segundo lugar, el incremento les servirá para “paliar huecos de la inflación”. Recordó
que las tarifas no se aumentaban desde mayo de 2013. Otra fuente de la empresa
coincidió. Señaló que los recursos que ingresen a la compañía por ese concepto
serán para disminuir las pérdidas de la empresa.
Agregó que desde que la Cantv es pública
las instrucciones de sus dirigentes es atender las zonas alejadas de los
centros urbanos, cuyos nuevos clientes no cancelan el servicio que reciben.
“Usan el teléfono por tres meses sin pagar y dejan que se lo corten. El grueso
de esas personas es de escasos de recursos, por lo que se entiende que no
tengan para pagar. Esto es lo que llaman gasto social”.
Faltan decodificadores
En lo que va de 2014 las empresas de
televisión por suscripción no han recibido respuesta de las solicitudes de
divisas, informó una fuente de la industria. Calcula que el requerimiento del
sector para el primer semestre rondó 50 millones de dólares.
Dijo que el crecimiento del sector está
limitado por falta de recursos. Señaló que en el caso de las compañías que
prestan servicio satelital no poseen decodificadores para atender nuevos
suscriptores. “Una de las empresas tiene muy pocas unidades en inventario y
otra tiene alrededor de seis meses sin equipos”. La que aún tiene, dijo la
fuente, restringe la instalación a uno por cliente.