Prensa. Prensa
Internacional Socialista.
Al
inicio de 2017, se hace aún más evidente que la situación política, social y
económica de Venezuela se torna cada vez más grave y urgente para millones de
sus habitantes, y la comunidad internacional no puede permanecer indiferente ni
ausente hoy frente a la crítica suerte de una nación que, a través de los
esfuerzos de toda una generación, fue capaz hace unas décadas atrás, de
erguirse y transitar por los caminos de la democracia.
Junto
a los mayores registros internacionales de inflación existentes hoy en una
economía nacional y de mayores números de muertos por homicidios y actos
criminales, se multiplica el sufrimiento humano, la pobreza y la desesperación
de ciudadanos que hoy no cuentan con ninguna protección de parte de unas
instituciones que no responden a las muchas emergencias que azotan a los
venezolanos y que reflejan características de un estado fallido.
En
este contexto, las expectativas generadas el año recién pasado de un diálogo
iniciado entre las fuerzas de oposición y el gobierno encabezado por el
Presidente Maduro, no se han concretado en resultados significativos,
contribuyendo así a la dramática situación que vive el país por el no
cumplimiento del gobierno de los acuerdos alcanzados entre ambas partes,
incluyendo la liberación de todos los presos políticos, el reconocimiento del
poder soberano de la Asamblea Nacional, respuestas adecuadas a la crisis
humanitaria y el establecimiento de un calendario electoral. Hecho que ha
impedido la continuación de este proceso de diálogo.
Más
aún, el año 2017 se ha iniciado con el desconocimiento por parte del Tribunal
Supremo de Justicia, hoy en manos de una mayoría en favor del gobierno, de las
facultades por parte de los legisladores en la Asamblea Nacional, frente a
decisiones recientemente adoptadas por este poder del estado y del flagrante
desconocimiento de la inmunidad parlamentaria, como en el caso del arresto del
legislador Gilber Caro de Voluntad Popular, partido miembro de esta
Internacional, actos ambos que denunciamos, ya que desconocen reglas
fundamentales del sistema democrático.
Ante
este creciente giro al autoritarismo que hoy presenciamos en Venezuela, nuestra
Internacional reclama una vez más el respeto a las libertades y los derechos de
todas las venezolanas y los venezolanos, y les manifestamos nuestra más
profunda solidaridad y apoyo. Estamos convencidos que el espíritu democrático
del pueblo venezolano prevalecerá y continuaremos a su lado desde los distintos
rincones del mundo.