Prensa. EFE. Diario Lider.
Un gigante reloj marca a partir de hoy en la playa de Copacabana en Río de
Janeiro los días, horas y segundos que quedan para el puntapié inicial del
Mundial del 2014 en Brasil, que hará el ensayo general para este evento desde
el sábado con la celebración de la Copa Confederaciones. El 12 de junio de
2014 la selección brasileña saldrá al césped para disputar el primer partido
del Mundial en Sao Paulo.
El reloj tiene unos cinco metros de altura y el diseño redondeado
característico del arquitecto más famoso de la historia de Brasil, Oscar
Niemeyer, ya que fue la última obra del artista, que murió en Río de Janeiro a
los 104 años en diciembre de 2012. En el acto de hoy en Copacabana, en
una mañana soleada y muy caliente, estuvieron el secretario general de FIFA,
Jérôme Valcke, y numerosas autoridades, pero fue Pelé quien atrajo la atención
de todos los bañistas que se encontraban en ese momento en la playa.
El exfutbolista pidió a los aficionados brasileños que no repitan el
comportamiento que exhibieron en el partido amistoso entre Brasil y Chile del
pasado abril, cuando perdieron la paciencia, abuchearon a su selección y
gritaron "olé" cuando los chilenos hacían pases. "Estamos
empezando a preparar a la selección brasileña y está claro que a veces las
cosas no van bien en el campo, pero tenemos un año aún para el Mundial. Vamos a
apoyar al equipo", dijo Pelé.
El llamado "Rey del Fútbol" comentó que Brasil necesita un equipo
organizado y la Copa Confederaciones, que comenzará el próximo sábado, será una
oportunidad para hacer esta preparación. "Ganar o perder la Copa es
una cuestión de suerte y de cómo el equipo va a estar allí, pero espero que yo
no tenga la misma experiencia que tuve a los nueve años, cuando vi a mi padre
llorar porque Brasil había perdido", dijo Pele, citando el famoso episodio
del "Maracanazo", cuando Brasil perdió la final mundialista en 1950
contra Uruguay en el estadio Maracaná.
La Copa Confederaciones reúne a los campeones continentales, al vencedor
del último mundial, España, y al anfitrión, Brasil, que abrirá el torneo el
sábado con un partido contra Japón en Brasilia. Al acto de hoy, además de
Valcke, también asistió el director general del Comité Organizador Local,
Ricardo Trade; el presidente de la empresa Hublot, cronometrador oficial del
Mundial, Jean-Claude Biver; el ministro de Deportes de Brasil, Aldo Rebelo, y
el vicegobernador de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezão.
Carlos Ricardo Niemeyer, nieto de Oscar Niemeyer, fue el encargado de
inaugurar el reloj.