Opinión. Félix
Velasquez.
Cuando
visitamos cada parroquia del Municipio Sucre nos damos cuenta de la tragedia en
la que están metido los vecinos que sufren los embates de la inseguridad, la
basura, el desorden social, la falta de agua, la anarquía en el tránsito y por
sobre todo el olvido por parte de los políticos locales y nacionales por estar
sumergidos en una diatriba política estéril, que lo único que ha conseguido es
hundir el Municipio en la pobreza.
Vemos
que hay un retroceso en la gestión local, cuando los vecinos de la Urbanización
Miranda en ocasiones tienen que comprar cisternas de aguas para paliar la
deficiencia del preciado líquido como lo hacen en la parroquia Caucaguita que
deben gastar 500 Bs fuertes para poder llevar un camión de agua para dicho sector,
se evidencia que las urbanizaciones están tan olvidadas como los barrios del
Municipio Sucre.
Cuando
vemos que la basura se come cada esquina de los barrios y de las urbanizaciones
sabemos que estamos mal;cuando la Alcaldía regala tanques de agua en la
Dolorita y en ese sector no llega el agua sabemos que estamos mal; cuando vemos
que las mascotas que son cuidadas en Palo Verde no cuentan con un terreno propio
para su protección y refugio sabemos que
estamos mal.
Pasar
por la redoma de petare y ver la anarquía reinante en el casco central producto de un comercio informal que no
colabora con la recolección de basura, que no paga luz y no paga impuestos para
mejorar su entorno sabemos que estamos sumergidos en un gran caos. Al analizar todos
estos problemas solo nos queda declarar el Municipio Sucre en emergencia para
llamar la atención de las autoridades competentes y de todos los habitantes de
las diferentes parroquias que conforman este sufrido Municipio.
Portodas
estas razoneses que debemos cambiar el paradigma político existente y
transformarlo en una herramienta de exigencia para mejorar el funcionamiento de
las instituciones y que los funcionarios públicos se bajen de esa nube de
intocables y entiendan que son servidores públicos y se deben al pueblo que los
eligió.
Desde
el partido Progreso Social apostamos al desarrollo, el urbanismo, el
emprendimiento, y el vencimiento de la pobreza en las parroquias Petare,
Dolorita, Mariche, Caucaguita y Leoncio Martínez. No podemos seguir pensado de
manera reduccionista, debemos ser más osados y atrevidos a la hora de pensar
nuestro amado municipio para obtener mejores resultados y no copiar los errores
del pasado.
Ya
las cartas están echadas, miles de venezolanos se cansaron de las mismas
promesas y decidieron cambiar la manera de elegir sus candidatos y de elegir a
sus alcaldes, ahora están buscando a los mejores hombres y las mejores mujeres
para estar en cargos de elección popular y no a políticos y demagogos que lo
único que hacen es mentir y jugar con la esperanza de sus electores.
@felixvelasquez