Opinión. Isaías Antonio Márquez
Díaz.
Dada la actitud de un Gobierno
reconcentrado en el poder por el poder, es cómo Guyana, abusivamente, ha vuelto
a otorgar dos concesiones, ahora, a la española REPSOL y a la estadounidense
ESSO, a objeto de que efectúen prospecciones costa afuera, vale decir, en
nuestra Zona Atlántica, bajo la insensibilidad de la cancillería y otros entes
encargados de responder por la soberanía territorial, como la Armada, pues
hasta cualquier iletrado sabe la importancia de este fundamento en toda nación.
Sería muy interesante saber ¿en
dónde están quienes se han rasgado vestiduras por la “Zona en Reclamación”, así
como el buen oficiante y su facilitador
Roy Chaderton? Ya que son escasos los que se han manifestado ante las nuevas pretensiones
guyanesas, incluido el presidente Maduro, quien durante su viaje a Guyana, el
sáb 31/08 pareciera haber hablado sobre nada con su homólogo, Ramotar.
Lo que sí pudiésemos asegurar,
es el retroceso, inexorable, de más de 40 años de gestiones por recuperarla,
incluso hasta el Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966. Cabe resaltar que la nave
POLARCUS ASIMA-IMO9538127, de REPSOL, ya está efectuando la sísmica y la
geofísica respectivas.No queda otra cosa qué estimar sino la desidia, rayana en
felonía.
Propongo, entre otros, la realización
de un acto de soberanía territorial organizado por AN-FANB, en Punta Playa,
isla Corocoro estado Delta Amacuro, sitio en donde culmina nuestro frente
atlántico e inicia la “ZONA EN
RECLAMACIÓN”, a objeto de que hagamos presencia nacionalista en dicho espacio,
el cual es nuestro desde 1777, cuando se crea la Capitanía General de
Venezuela, pues así nació nuestro país, junto con la fachada y territorio en
cuestión.
Miembro del consejo académico
del IDEFV
isaimar@gmail.com
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