Prensa. Diario
El Nacional.
El SNTP, el IPYS
y Espacio Público advierten que ataques a trabajadores de la prensa han
aumentado. Lamentan cambios en líneas editoriales
ÁLEX VÁSQUEZ S.
Hoy,
Día del Periodista, el ejercicio de la profesión en Venezuela no tiene nada que
celebrar. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa, el Instituto
Prensa y Sociedad y Espacio Público coinciden en que 2014 ha sido el peor año
para la profesión en mucho tiempo.
El
SNTP registra 160 periodistas y trabajadores de la prensa agredidos en lo que
va de año, 63% de ellos víctimas de los cuerpos de seguridad del estado. La
cuenta del IPYS es mayor: 174 periodistas atacados desde enero.
“Este
es el peor año en mucho tiempo, más agresiones que en tiempos electorales
cuando sabemos que debido a la polarización los periodistas han quedado en
medio de la confrontación. Cada agresión contra un trabajador de un medio es
una agresión a la libertad de expresión”, dijo Marco Ruiz, secretario general
del SNTP.
Pero
estos hechos solo son la cara visible de los ataques a la libertad de
expresión. Tanto Ruiz como la directora del IPYS, Marianela Balbi, y el
director de Espacio Público, Carlos Correa, advierten que hay nuevos mecanismos
de censura: las restricciones de divisas para adquirir papel y la compra de
medios de comunicación.
“Si
bien es propio de cualquier economía abierta la compra de un medio, esas
negociaciones han estado caracterizadas por cambios en las líneas editoriales,
como ocurrió en Globovisión, Últimas Noticias y varios diarios del interior”,
señaló Balbi.
“Los
medios comprados están rendidos a intereses político partidistas. Ha
significado una enorme presión para los trabajadores y también se dio la
pérdida de más de 200 puestos de trabajo”, expresó Ruiz.
Correa
indicó que las protestas evidenciaron la ausencia de medios libres para que los
ciudadanos se informen, por lo que las personas han tenido que migrar a las
redes sociales para saber qué ocurre. Ruiz dijo que hoy a las 10:00 am, en la
sede del SNPT, anunciarán acciones de protesta.