Prensa. EFE.
El mandatario
asumió su segundo periodo con la promesa de concluir el conflicto. Álvaro Uribe
se retiró del acto ante delegación de Venezuela
BOGOTÁ AFP-EFE
El
presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, asumió su segundo mandato decidido
a sellar la paz. “Colombia transita hoy un camino de esperanza, un camino hacia
la paz. El país seguirá avanzando con o sin las FARC”, dijo en la toma de
posesión realizada en la Plaza de Nuñez, entre el Congreso y la Casa de Nariño
(sede del Ejecutivo).
Santos,
electo por primera vez hace cuatro años tras liderar la mayor ofensiva contra
las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia cuando era ministro de Defensa
de su predecesor y exmentor Álvaro Uribe, devino en el gran impulsor de las
negociaciones de paz con esa guerrilla, la principal del país con cerca de
8.000 combatientes.
Un
proceso al que podría sumarse el Ejército de Liberación Nacional si tienen
éxito los diálogos exploratorios iniciados en junio, y que tendrá el camino
despejado: un día antes de la investidura, la Corte Constitucional le dio el
visto bueno al acuerdo alcanzado en Cuba para que los guerrilleros que dejen
las armas participen en política.
El
máximo tribunal decidió que el convenio se ajusta al ordenamiento legal del
país, aunque aclaró que sólo podrán participar en política los insurgentes
desmovilizados con delitos menores. Esa posibilidad quedará vetada para los que
hayan cometidos delitos de lesa humanidad y genocidio.
La
sentencia, que rechaza la demanda interpuesta contra la reforma conocida como
el Marco para la Paz, determina que el Congreso será el encargado de definir
cuáles son los delitos que quedarán exonerados y reglamentar las penas
alternativas que tendrán que pagar los guerrilleros y la forma en que repararán
a las víctimas.
En
la toma de posesión, sin embargo, Santos se permitió lanzar una advertencia a
la guerrilla al decir que los actos violentos como los registrados en la última
semana son inaceptables y ponen en riesgo el proceso de paz. “Señores de las
FARC: ¡están advertidos!”.
Buen
vecino. Santos subrayó que su gobierno mantendrá las mejores relaciones con
todos los países del mundo. Recordó que hace cuatro años "Colombia tenía
dificultades que parecían insalvables con algunos vecinos, pero la situación ha
cambiado"..
El
jefe del Estado hizo un llamado a la unidad de sus compatriotas en torno a la
construcción de un nuevo país en paz, con equidad y educado. “Creo firmemente
que Colombia debe trazarse una meta en la que todos nos podamos comprometer:
ser en 2025 un país en paz total, un país con equidad y el más educado de
América Latina”, reiteró
De
acuerdo con el presidente, Colombia transita un camino de esperanza hacia la
paz y la seguridad social, por lo que llamó a pensar en grande por el país que
se desea.
Los
casi 2.000 invitados, entre ellos 10 jefes de Estado y 7 vicepresidentes, a la
segunda investidura de Santos llevaban paraguas de color blanco de la paz en
los que podía verse dibujada la silueta de una paloma, el mismo tono que
decenas de niños vistieron en la apertura de la ceremonia.
El
ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe, y la bancada parlamentaria de Centro
Democrático se retiraron del acto en protesta por los abusos de poder de Santos
en la campaña y la presencia del ministro de Planificación de Venezuela, Ricardo
Menéndez, en nombre de Nicolás Maduro. “El gobierno venezolano ha protegido a
narcoterroristas colombianos”, afirmó.
La
Cifra
2.000
invitados asistieron a la toma de posesión, incluidos más de una decena de
jefes de Estado.