Se dice que el
turismo estudiantil es el practicado por grupos de estudiantes, en la mayoría
de los casos en compañía de profesores del Instituto donde cursan estudios y
con la organización por técnicos en la materia, cuando se disponen a visitar
sitios históricos, museos, parques, monumentos, ambientes naturales de
importancia, playas, montañas, llanuras etc.
Prensa.
venezuelatuya.com.
Este
tipo de turismo es de suma importancia y si es debidamente planificado se
convierte en oportunidad para ampliar conocimientos que forman parte de la
educación de los jóvenes. Así mismo le permite conocer de cerca ciertos sitios
y actividades de los que solamente se han enterado en forma somera por
explicaciones de cátedra.
Es
muy impactante para un niño, ver de cerca y navegar por el río Orinoco, que
aunque el sabía que es el más grande de Venezuela, no había palpado la magnitud
de su agua por la que ahora está rodeado. Así mismo lo emociona el espectacular
paisaje que combinado con las diferentes alturas, va observando cuando asciende
por el teleférico de Mérida hasta el Pico Bolívar. De igual forma se
sorprenderá cuando visite la Represa del Gurí (Raúl Leoni) y consta que es la
segunda del mundo, y que lo que posiblemente ya le había explicado su profesor
en el aula es cierto y que sí se producen 50.000 Gigavatios/hora de
electricidad de los cuales una parte se exporta a Colombia y al Brasil; y que
al visitar el "Museo de Agua" instalado en el sitio de la represa, se
va a informar de muchos detalles de esta gran obra, y allí puede observar cómo
funciona un "reloj de sol".
También
en otros "tours" podrá saber cómo funcionan los pozos petroleros y
cuál es la forma como el "balancín" extrae el petróleo u "oro
negro" como también se llama. También con vivir un buen rato en la
"Cueva del Guacharo", o en una visita especial informarse como se
fabrica el cemento, o cuales son las pinturas más importantes que exhibe
nuestros museos, o también asistir a importantes conciertos o nadar en nuestras
cálidas playas.
El
turista siempre se desplaza con la idea de culturizarse, pero si desde niño se
le da la oportunidad de conocer la fuente donde están los elementos que
producen la cultura, ésta vendrá más fácilmente. Así entiendo el Turismo
Estudiantil, se convierte en un factor pedagógico y formador de cultura. El
estudiante al observador y palpa el valor e importancia de las obras y de los
sitio que ha visitado, aprenderá a quererlos.
También
el profesor podrá más fácilmente hacer las explicaciones de la materia que
enseña. El turismo en general y el estudiantil en particular, bien dirigidos y
explicados se convierten en formadores de conciencia en el educando frente a
fenómenos, que es además, de disfrute y esparcimiento, factor de desarrollo
económico. El turismo así inducido, es decir desde la escuela, prepara mental y
culturalmente al futuro ciudadano a entender la importancia del mismo para el
desarrollo del país, y tendrá siempre clara conciencia frente al mágico
fenómeno del turismo.
El
turismo estudiantil debe promoverse intensamente pues lo que se aprende en la
niñez y en la juventud, perdura para el resto de la vida. Cuando la lectura de
textos y las explicaciones del maestro se constatan con la realidad se entiende
mejor y se amplía el horizonte de la vida. Una persona educada desde la niñez
para formarse con conciencia frente al turismo, apreciara más y más, lo que el
país posee y por supuesto lo va a querer eternamente