Prensa.
Estimulo.com.
Al
bautizar una revista sobre las bolsas de comida CLAP que raciona su Gobierno en
tiempos de hambre y escasez, el Presidente Nicolás Maduro lanzó con una sonrisa
en los labios la frase: “la dieta de Maduro te pone duro, sin necesidad de
Viagra”.
En
un acto celebrado el domingo en el Teatro Simón Bolívar de Caracas, el jefe de
Estado se refirió a uno de sus conocidos y se sorprendió por su flacura. Ahí,
soltó el dicho ante las cámaras de VTV. Esto seguramente retumbará en los oídos
(y en la tripas) de muchos.
La
“dieta Maduro”, como se conoce popularmente el aguante del venezolano común a
la crisis, es sentida por millones en los últimos dos años. El acelerado ritmo
de la inflación en los alimentos -producto de los controles en la economía y un
gasto fiscal descontrolado- ha llevado a sectores de clase baja y media a
colocar su talla y peso en una especie de tobogán, ante lo costoso que resulta
acceder a proteínas y carbohidratos… si es que lo hay en los abastos y
mercados.
Quizás
no lo ha visto, pero el jefe de Estado debe saber que hay niños y adultos muertos
en varias partes del país por los rigores de la dieta que lleva su apellido. En
la Alta Guajira venezolana la “dieta de Maduro” fue sentida en carne propia por
los dos de los hermanitos González que murieron por no haber probado bocado en
días.
La
“dieta de Maduro” también mató a Royer Augusto Machado, el bebé de 18 meses en
el sector de las Trinitarias de Maracaibo luego de tres días sin comer. La
“dieta de Maduro” además desmayó como pines de bowling a los estudiantes en las
aulas de Fe y Alegría en Ruiz Pineda. No tener nada para comer es sentido por
millones. Un estudio elaborado por More Consulting para la Asamblea Nacional
opositora asegura que más de 53% de los venezolanos se ha acostado una vez sin
probar alimentos gracias a la “dieta de Maduro”.
Son
cifras y realidades que varios funcionarios del gobierno se afincan en
desconocer (y ocultar). Es tiempo para que el Presidente haga honor a su
apellido y madure sus palabras, muchas de las cuales no dan risa.
Sobre
el encuentro que tuvo la tarde de este sábado con el ex presidente español José
Luis Rodríguez Zapatero, que actúa como mediador para impulsar un encuentro
entre el oficialismo y la oposición, dijo que fue una reunión “muy fructífera
en el esfuerzo por el diálogo”.
Maduro
no adelantó, sin embargo, qué fue lo que conversó en ese encuentro con el
político español. Maduro reiteró que ha
pedido la ayuda de la Unasur y de los expresidentes para “vencer la cultura del
odio” que, asegura, ha sembrado la oposición venezolana con el presidente de la
Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, a la cabeza.
Ramos
Allup “se mete con una mujer aquí, con una mujer allá (…) en ese lenguaje que
él tiene. No puede ser que de manera impune esta gente, todos los días,
arremete contra una mujer digna, profesional de la República, como la
presidente del Poder Electoral (Tibisay Lucena) y todas las rectoras del CNE.
Arremete contra esta digna mujer, profesional de la República, que ha dedicado
su vida al derecho, como es la presidenta del TSJ, la magistrada doctora Gladys
Gutiérrez. Y contra la Fiscal Luisa Ortega Díaz”, comentó Maduro.
Reiteró
que la demanda internacional contra Ramos Allup sigue en curso por presuntas
ofensas a las mujeres que encabezan los Poderes Públicos. También se refirió a
las declaraciones del diputado Julio Borges que, en su opinión, son amenazas
contra la presidenta del CNE.
“Nosotros
tenemos que actuar jurídicamente y que ellos (Ramos Allup y Borges) paguen lo
que tienen que pagar en los tribunales de la República por sus ataques de intolerancia,
de odio. Por sus amenazas”, sostuvo. Aclaró que en este diálogo se busca la paz
y no se trata de una “negociación” de su mandato como supuestamente han
sugerido algunas personas.
“A
veces sale gente por ahí que se les desvaría la cabeza y que (dice que) Maduro
está negociando, hay que ser bien malvado para decir eso. ¿Ustedes creen que yo
soy capaz de negociar y traicionar al pueblo? Hay que ser bien perverso y
malvado”, dijo el presidente que reiteró que siempre será “leal” a la
revolución bolivariana.
En
ese sentido, anunció que en los próximos días llegará al país el secretario
general de la Unasur, Ernesto Samper, a fin de continuar las acciones de
diálogo con la oposición. Durante el bautizo de la revista sobre las bolsas de
comida CLAP, aprobó además 80.000 millones de bolívares para cubrir el aumento
de salario y cestatickets de gobernaciones y alcaldías.
“Y
si hacen falta nuevos recursos para el remate del año, vamos a calcular porque
yo quiero que los excedentes del pago de impuestos se invierta en lo que
necesite el pueblo. Eso sí, gobernador de la yuca (Henrique Capriles Radonski)
hay que cuidar el dinero porque le debe hasta a los bomberos”, dijo.