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En
el municipio Antonio Díaz de Delta Amacuro y la región de Padre Pedro Chien, en
el estado Bolívar, se realiza trabajo de minería según declaraciones de
personas que habitan en el lugar. El tema sigue. Aún no ha sido resuelto, pero
por ahora las disputas han mermado
Tucupita,
12 de septiembre. Por Eldrys Valenzuela. |
Para muchos es aún un territorio desconocido, pero ante la falta de
oferta laboral, muchos jóvenes y personas de avanzada edad se han atrevido a
explorar el territorio minero del estado Delta Amacuro, algunos contando con la
suerte de no ser tocados por una de las enfermedades más fuertes de los últimos
tiempos: el paludismo.
El
trabajo de la minería requiere de mucho tiempo, esfuerzo físico y paciencia. La
necesidad ha hecho que hombres y mujeres se movilicen hacia sectores como
Antonio Díaz para poder reunir dinero suficiente.
De
aquí se han ido creando minas que se organizan para que cada quien conozca
cuáles son sus tareas y no resulten explotados, no obstante, esto no implica
que todo resulte ser la paz y amor que fácilmente pueden sonar mientras usted
lee esto.
Precedentes
El
trabajo de la minería se ha ido trabajando de forma paulatina en este medio de
comunicación. En ediciones anteriores se ha dado a conocer sobre los problemas
que enfrenta el municipio Antonio Díaz de Delta Amacuro y la región de Padre
Pedro Chien, estado Bolívar.
El
tema sigue tambaleándose. Aún no ha sido resuelto, pero por ahora las disputas
han mermado. El asunto con el sector Chaliense, de la parroquia Curiapo, es que
las grandes minas quieren ser dirigidas por funcionarios del estado Bolívar.
Esto según la declaración de una de las campesinas y habitantes del lugar,
Eulogia Caraballo.
Además
de esto, otro problema que enfrentan es la presunta explotación por parte de
efectivos castrenses de aquella zona, a quienes los mineros deben entregar más
del 50% del oro que logren recaudar.
Ilícitos
Fuentes
que quisieron mantenerse bajo el anonimato informaron que desde hace algún
tiempo personas que operan en la banda del sindicato de Barrancas, estado
Monagas, se han terminado de trasladar hacia el territorio deltano.
Desconocen
cuántos son, pero el hecho es que ya se mantienen operando en las minas de San
José de Amacuro. La situación ha hecho que muchos de los que se encontraban
laborando allá se pongan en alerta y comiencen a movilizarse hacia Casacoima y
Tucupita. Autoridades podrían ya encontrarse investigando la situación, aunque
el acceso a estas zonas siempre ha resultado difícil.