La decisión del gobierno del presidente
Donald Trump de terminar con el programa de Estatus de Protección Temporal
(TPS) que permite a cerca de 200,000 salvadoreños residir legalmente en Estados
Unidos podría potenciar la pandilla conocida como Mara Salvatrucha (MS-13), una
de las organizaciones delictivas que prometió erradicar el mandatario, informó
el medio Business Insider.
Prensa. Mundo Hispánico.
El
fin del amparo migratorio el próximo 9 de septiembre de 2019 obligará a los
afectados a decidir entre un retorno a El Salvador o permanecer en Estados
Unidos de modo irregular y ser blancos para la deportación. El mandatario
estadounidense ha criticado el TPS por haberse convertido en un beneficio
indefinido para cientos de miles de inmigrantes pese a que fue concebido como
una medida temporal.
Existe
el temor, sin embargo, de que una expulsión masiva de salvadoreños a su país de
origen fomente las operaciones de la MS-13, a quien Donald Trump acusa de
transformar comunidades enteras en Estados Unidos en “mataderos sangrientos”. El
retorno a El Salvador de 200,000 salvadoreños al igual que miles de familiares
ajenos al país centroamericano podría fomentar las actividades de la MS-13 en
dos modos importantes:
“Primero:
tendría un amplio número de personas que llegaría con algo de dinero y que
sería blanco inerme para sus propósitos”, dijo al Business Insider Geoff Thale,
director de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos. “Segundo:
llegaría una cantidad importante de jóvenes que podrían ser reclutados
fácilmente”, agregó.
“Es
bien sabido que tanto allá como acá (en Estados Unidos) los jóvenes sin
oportunidades… que no logran integrarse a una comunidad… son los más
susceptibles a caer en las pandillas”, puntualizó Thale. Por otro lado, los
esfuerzos del gobierno salvadoreño por contrarrestar las actividades de la
pandilla con “mano dura” no han surtido efecto.
“Las
pandillas se han dividido secciones enteras del país y comunidades entre sí.
Las personas que llegarían del extranjero desconocerían los límites actuales”,
dijo al Business Insider Mike Allison, catedrático en la Universidad de
Scranton. “Cruzar
una de esas fronteras para ir al supermercado, a la escuela o a visitar a los
amigos es un riesgo que les puede costar la vida. Los salvadoreños que viven
ahí conocen la situación, pero aquellos que están fuera no”, agregó Allison.
La
notoria MS-13 surgió en el sur de California con el flujo de inmigrantes
procedentes de Centroamérica que huían de las guerras civiles – El Salvador en
particular, en los años 70 y 80. El gobierno estadounidense intervino al tomar
bando en los conflictos, derrocar gobiernos y apoyar a grupos señalados por abusos
contra civiles – una situación que obligó a muchos a migrar a Estados Unidos. Pandillas
como la MS-13 cuentan con cerca de 60,000 integrantes en El Salvador, un país
con una población de cerca de 6.5 millones.
Con información del
medio Business Insider