Prensa. Efecto
Cocuyo.
José
Manuel Morgado Bello, de 48 años de edad, fue ubicado a 60 kilómetros de
distancia del lugar donde ocurrió el múltiple infanticidio. Funcionarios del
Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc)
sostuvieron un presunto enfrentamiento con el hombre, señalado de ser el
victimario de los niños de El Valle.
Información
policial relata que Morgado Bello fue localizado en una vivienda de la
carretera Cúa – San Casimiro, específicamente en el sector La Quebradita, del
estado Miranda. Allí se atrincheraba con una escopeta, que al parecer usó en
contra de las comisiones el 15 de septiembre a las 10:00 de la noche. En el
enfrentamiento, murió dentro del inmueble.
El
viernes en la noche, vecinos del barrio El 70 de El Valle encontraron en la
vivienda improvisada de Morgado Bello los cadáveres de cuatro niños. Se trataban
de los hermanos Roxana Alexandra Conde Graterol (10), Julianyerli Valeria Conde
Graterol (4) y Jonas Jonneiker Conde Graterol (1) y otro niño de la localidad,
Humberto Ruiz (10).
La
policía lo marcó a él como el principal sospechoso de la muerte de los niños de
El Valle. Aseguran que abusó sexualmente de la niña mayor y asesinó a todos con
golpes. Para ello usó un martillo. Los vecinos quemaron el lugar de los hechos,
en medio de la conmoción del homicidio múltiple.
De
acuerdo con los parientes de las víctimas, la madre de los tres hermanos
Norelys Graterol, salió en la mañana del viernes 14 de septiembre. Fue a
llevarle comida a su esposo preso. Le entregó la llave a la niña de 10 años de
edad y la dejó al cuidado de los otros dos.
“Es
mentira que los niños estaban desaparecidos. Ese tipo los mató el mismo
viernes, cuando se aprovechó de que mi hermana tuvo que salir y se valió de que
los conocía para engañarlos y llevárselos para hacerles esa maldad”, dijo un
familiar de los pequeños, en la morgue de Bello Monte a Monitor de Víctimas.
Morgado
Bello se había ganado la confianza de los niños, dándoles caramelos y
chucherías. Logró que le abrieran la puerta el viernes 14 de septiembre y se
los llevó a su casa improvisada. Humberto Ruiz pasó por el sitio y habría visto
el crimen, por lo que el hombre lo sometió y lo mató también. No quería
testigos.