Prensa.
Diario Las Américas.
El
Departamento de Estado norteamericano ha mostrado su apoyo este domingo al
pueblo venezolano para "recuperar su democracia y poner fin al régimen
ilegítimo de (Nicolás) Maduro" y han asegurado que lo "único"
que hay que negociar durante la mesa de negociaciones que tendrá lugar en Oslo
la próxima semana "son las condiciones de su partida".
"Los
esfuerzos anteriores para negociar el fin del régimen y la celebración de
elecciones libres han fracasado porque el régimen los ha utilizado para dividir
a la oposición y ganar tiempo", ha señalado esta institución en un
comunicado oficial emitido este domingo en donde han señalado que "unas
elecciones libres no pueden ser supervisadas por un tirano".
Asimismo,
han recordado que este sábado se cumplen 17 días de la "detención y
desaparición de Edgar Zambrano, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional
de Venezuela", definida por el Departamento de Estado como "la última
institución democrática que queda en el país".
"Desde
su detención, Zambrano no ha tenido contacto con su familia ni con sus abogados
y se desconoce su ubicación. Hoy también se cumplen más de dos meses del
encarcelamiento de Roberto Marrero, abogado y jefe del presidente interino,
Juan Guaidó. No son más que dos de los 800 presos políticos que el régimen de
Maduro tenía hasta el 20 de mayo", han añadido.
Por
último, han anunciado su decisión de unirse a "los partidarios de la
democracia en Venezuela en todo el mundo para condenar su encarcelamiento
ilegal por el régimen de Maduro y exigir su liberación inmediata".
El
presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, ha aceptado este domingo el
llamamiento del Gobierno de Noruega para una nueva ronda de negociaciones entre
las delegaciones del régimen y la oposición con el objetivo de seguir "una
ruta muy clara" que pasa, según ha explicado a través de la red social
Twitter, por el "cese de la usurpación, un gobierno de transición y la
celebración de elecciones libres".
La
crisis política empeoró el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un
segundo mandato de seis años fundado en su triunfo electoral. En respuesta,
Guaidó se juramentó como mandatario interino con el objetivo de cesar la
"usurpación", crear un gobierno de transición y celebrar "elecciones
libres".
Estados
Unidos, la mayoría de los países latinoamericanos, incluido Colombia, y
numerosos europeos, entre ellos España, han reconocido a Guaidó como
"presidente encargado". Maduro cuenta, por su parte, con apoyos de
Rusia, China y Turquía, además de Cuba, Nicaragua y Bolivia.
FUENTE: Con información de Europa Press