La
Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elevado la alerta a “nivel muy alto”
en todo el mundo tras los casos de brote que se han detectado en el Mundo. El
caso del coronavirus que apareció en China y sus dañinos efectos se expanden
por el todo el mundo.
A
la humanidad le está pasando algo importante, mucho más que una simple gripe. El
brote que surgió en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, ha producido
grandiosas pérdidas a la economía del gigante asiático que para contrarrestarlo
ha desplegado un enorme trabajo científico, económico y humano que ha sido
reconocido por las principales organizaciones mundiales y numerosos gobiernos.
La
OMS, declarar epidemia el brote de coronavirus en la mayoría de los países a
nivel mundial, lo que significa que muchos de nosotros pudríamos contagiarnos
y, aunque la mayoría estaremos bien en el nombre de Dios, para los más
vulnerables y sensible podría conjeturar la diferencia entre la vida y la
muerte, todos podríamos enfrentarnos con el Covid-19.
Hoy,
nuestra tarea es movilizarnos para sosegar su trasmisión. Los habitantes del Planeta tierra nos
enfrentamos a frentes serias adversidades, no podemos dividirnos a causa del
miedo, es necesario unirnos en amor y a un solo propósito bien común.
Es
imperioso que la humanidad Firme un compromiso para ayudar a frenar el virus,
¿cómo? Tomando todas las precauciones necesarias para prevenir el contagio del virus,
debe ser un compromiso de cada ciudadano en estos momentos, cada individuo y su
conducta es el más significativo el factor de resguardo y protección.
En
el mundo, muchos han sido contagiados por este virus y todos estamos nerviosos
e intranquilo por la situación. Los seguidores de Dios, tenemos una manera
diferente de estudiar la existencia y la historia.
Estamos
viviendo un momento difícil en todo el planeta tierra, pero Dios está con
nosotros, es necesario creer que Dios está trabajando en todas estas grandes
cosas, son enseñanzas para muchas de las personas.
Ante
esta visita inesperada de un virus, se insta a profundizar en la confianza
absoluta en Dios, fuente de salvación y de esperanza. Es importante la
excelente actitud de responsabilidad y la voluntad de colabora.
El
Covid-19, no es un juego, permanece en casa y todo saldrá bien, la vacuna eres
tú, estar en el deber y en la responsabilidad en acatar todas las medidas
quesean necesaria para evitar así que el virus siga con su propagación, es un
llamado a la conciencia, reintegrando, que es un momento para estar con la
familia y primeramente para elevar oraciones al Dios que hizo los cielos y la
tierra.
Permanecer
en el hogar, no es sólo una actuación de resguardo propia sino de toda la
comunidad en general. Si nos cuidamos a nosotros mismos, estaremos evitando
contagios a toda la familia y a todas las personas que nos rodean.
Por
eso es transcendental que todos nos salvaguardemos en nuestras residencias,
saliendo exclusivamente para lo fundamental, porque, de esta manera, todo
saldrá bien y esta dificultad pasará.
Redacción: Pasante de UBV. Rosa López
Escuela de Periodismo Edward Murrow de
Senderos de Apure.
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